La actualización del Diccionario de la lengua española incluye más de 2.500 novedades
24 nov 2020 . Actualizado a las 20:10 h.La Real Academia Española (RAE) presenta este martes una actualización del Diccionario de la lengua española con 2.557 novedades, entre las que se encuentran nuevas adiciones y enmiendas. Lo más llamativo en esta oportunidad es la incorporación de varios vocablos relacionados con la pandemia del coronavirus. Así, «COVID», «coronavirus», «desconfinamiento» y «cuarentenar» son algunas de las nuevas palabras añadidas a la versión digital del diccionario, que también incluirá nuevas definiciones para palabras como «confinamiento».
El término «COVID», con mayúsculas, se define como síndrome respiratorio agudo producido por un coronavirus. Además, se aclara que el acrónimo proviene del inglés «coronavirus disease», o «enfermedad del coronavirus». A su vez, el «coronavirus» es «un virus que produce diversas enfermedades respiratorias en los seres humanos, desde el catarro a la neumonía o la COVID». Y «cuarentenar» se refiere o bien a «poner a alguien en cuarentena» o «pasar un período de cuarentena». Asimismo, en la definición de «confinamiento» se ha incluido una acepción que habla de «un aislamiento temporal y generalmente impuesto a una población, persona o grupo por razones de salud y seguridad».
El nuevo diccionario suma también numerosas novedades en términos no relacionados con el coronavirus. Por ejemplo, se acepta «fascistoide», con la definición de persona «que tiende al fascismo o autoritarismo» o de «parafascista», alguien «que tiene semejanza con el fascismo». También a la palabra «democracia» se le añaden acepciones «de forma compleja», con términos como «orgánica», «representativa» o «popular». El diccionario ahora recoge «intifada», para hablar de «insurrección popular palestina protagonizada por los jóvenes frente a las fuerzas israelíes de ocupación».
Es novedad también la palabra «provida», que habla de quien «se opone al aborto inducido, a la investigación con embriones humanos y a la eutanasia».
El director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, ha reconocido que la elaboración de estos diccionarios es «un trabajo severo, laborioso y muy riguroso», muchas veces expuesto a la crítica. «No pretendemos en modo alguno inventar nada. Somos testigos y notarios de cómo hablan los hispanohablantes», ha destacado.
La Real Academia dio a conocer además la primera edición de su Crónica de la Lengua Española, editada por Espasa. «Esta obra académica nace con el objetivo de difundir los trabajos desarrollados por la RAE a lo largo del último año y describir o explicar los problemas más relevantes que afectan a la unidad de nuestra lengua en el universo hispanohablante, exponer sus criterios sobre cómo abordarlos y enfrentar los cambios que experimenta nuestro idioma, tanto en lo relativo al léxico como a la gramática», explica la academia.
Hace unas semanas, la RAE había estrenado su nuevo portal web, en el que está disponible el Observatorio de Palabras, una sección con información sobre términos y expresiones que por el momento no aparecen en el diccionario, pero que han generado dudas a los hablantes, como neologismos recientes, extranjerismos, tecnicismos y regionalismos. En esa ocasión, la Academia negó que se estuviera evaluando la incorporación del pronombre «elle», la forma denominada «inclusiva» que se usa en algunos círculos sociales en la lucha contra el sexismo, para referirse a grupos conformados por tanto mujeres como hombres, o grupos en los que no es posible distinguir el género. La institución insistió en que es imposible inventar un pronombre, aunque se había declarado «totalmente contraria a cualquier tipo de sexismo, ya sea de mujeres o de miembros del colectivo LGTBI» en enero del 2020.