Trump ataca a Biden con unos correos explosivos sobre los negocios de su hijo
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El presidente exige al candidato demócrata que revele de «inmediato» el supuesto delito de tráfico de influencias del que acusa a Hunter Biden
15 oct 2020 . Actualizado a las 10:35 h.El presidente Donald Trump ofreció este miércoles un cóctel de supuestos correos electrónicos robados, tráfico de influencias y favores de espías rusos para dinamitar la campaña electoral de su adversario, Joe Biden. Todo removido y servido por su abogado, el exalcalde de Nueva York Rudi Giuliani, en una exclusiva a The New York Post, tabloide propiedad del magnate británico Rupert Murdoch desde 1977 y responsable de fomentar en los años 80 el mito de Trump como exitoso magnate inmobiliario.
Los correos publicados muestran supuestamente cómo el hijo del candidato demócrata, Hunter Biden, ofreció en abril del 2015 una reunión con el entonces vicepresidente de Barack Obama a un asesor de la empresa de gas natural ucraniana Burisma, un año después de unirse a la junta directiva de la compañía con un sueldo de 50.000 dólares al mes y sin tener experiencia previa. «Gracias por invitarme a Washington y darme la oportunidad de conocer a tu padre», le contestó Vadym Pozharskyi en uno de los e-mails. El diario no concreta si la reunión se llegó a producir. Y alega que Biden presionó un año después al Gobierno de Kiev para deshacerse de un fiscal que quería investigar la supuesta corrupción en Burisma, una acusación que nunca se demostró.
En un mitin en Des Moines, Iowa, Trump reclamó a Biden a «revelar de inmediato todos los correos electrónicos, reuniones, llamadas telefónicas, transcripciones y registros relacionados con su implicación en los negocios de su familia y el tráfico de influencias a lo largo del mundo, incluida China y Rusia». En este acto electoral, Trump sugirió que las alegaciones de corrupción contra Hunter Biden deberían descalificar a su padre de la carrera presidencial.
A pesar de los cabos sueltos de la información, miles de usuarios compartieran la noticia en las redes sociales, lo que provocó que Facebook limitara su distribución. El equipo de campaña de Biden no tardó en reaccionar a asegurar que el diario nunca se puso en contacto con ellos y que el encuentro no tuvo lugar porque en esas fechas el entonces vicepresidente tenía otros compromisos.
Datos robados
El abogado de Hunter Biden, acusó al equipo de campaña de Trump de utilizar hackers rusos para conseguir el contenido de los correos. Según lo revelado por The New York Post, el contenido se sacó de un portátil MacBook Pro que Hunter llevó a reparar en abril del 2019 a una tienda de Delaware y nunca recogió. El abogado de Giulini, Bob Costello, advirtió en una entrevista en Fox News de que existen cerca de 40.000 correos de contenido comprometido. El Comité de Seguridad Nacional del Senado, dirigido por el republicano Ron Johnson, anunció que está investigando el asunto tras contactar con el denunciante que tenía la computadora portátil.
Se repite la escena del final de la campaña electoral del 2016. Trump utilizó entonces los correos enviados por Hillary Clinton desde un servidor privado cuando era secretaria de Estado con Barack Obama para minar su credibilidad. El FBI concluyó que no debía ser procesada por ello, pero la intoxicación dejó en casa a los votantes demócratas dudosos de respaldar a la candidata. La frase que les sirvió como excusa, «pero sus correos», se convirtió en todo un símbolo del fracaso de Clinton frente a Trump. El republicano busca ahora utilizar la misma estratagema cuatro años después y a veinte días de las elecciones.
Los republicanos alaban las ideas contra el aborto de la jueza Barrett
Los republicanos voltearon sus cartas este miércoles en la última sesión para la confirmación de la juez Amy Coney Barrett para la vacante al Tribunal Supremo. Ante la sorpresa de todos, incluida la propia candidata, el senador republicano Lindsey Graham elogió la posición «descaradamente provida» de Barrett y dijo que su confirmación será un avance «histórico» para las mujeres conservadoras. Durante las tres audiencias celebradas, Barret se había negado repetidamente a responder cómo fallaría sobre una posible impugnación de la sentencia Roe & Wade de 1973, que estableció el derecho al aborto en 1973, ante la insistencia de los demócratas. El Senado, de mayoría republicana, votará el 22 de octubre si ocupa de por vida la vacante dejada por Ruth Bader Ginsburg.