Un voraz incendio causa graves daños en el chalé de Teo donde sucedió el crimen de Asunta

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO

ACTUALIDAD

Un particular alertó pasadas las tres de la madrugada del fuego que se extendió por las plantas bajas y afectó a la estructura de la vivienda

12 oct 2020 . Actualizado a las 11:40 h.

La tragedia persigue al chalé de Teo donde se produjo el asesinato de Asunta Basterra hace ya siete años. Esta madrugada, la vivienda de tres plantas del lugar de A Póboa (muy cerca de Montouto) que se hizo famosa por el crimen atribuido a los padres de la pequeña, sufrió graves daños por las llamas. Un voraz incendio declarado pasadas las tres de la noche se extendió por las plantas bajas y afectó a la estructura de la vivienda debido a las altas temperaturas alcanzadas.

Un particular alertó al Centro Integrado de Atención ás Emerxencias del 112 Galicia, a las 3.15 horas, de lo que sucedía y una patrulla de la Guardia Civil fue la primera en personarse en el lugar. A continuación, llegaba el primer equipo contraincendios, el del Grupo de Emerxencias Supramunicipal de A Estrada, cuya intervención duró más de tres horas y media, hasta las 6.55 horas, entre que sofocaron las llamas, enfriaron por completo paredes y suelos para evitar que los rescoldos reavivasen el incendio, y airearon las estancias -con una gran carga tóxica debido al denso humo-. Contaron también con la colaboración de un equipo de bomberos de Ordes y dos miembros de la agrupación de voluntarios de Protección Civil de Teo en las labores de extinción.

Todavía se desconoce el foco y las causas que rodean al incendio. Profesionales que trabajaron esta noche en el punto explican que cuando llegaron al chalé toda la primera planta ardía, así como parte de la segunda. Se quemaron por completo tres habitaciones y observaron que había una gran cantidad de libros y material inflamable tirados en el suelo, pero se desconoce por ahora si las llamas se iniciaron en el salón o en otra estancia. Aunque el fuego no llegó a colarse en la tercera planta, todo la vivienda se vio afectada por el humo y sus estructuras quedaron seriamente dañadas.

Intrusiones nocturnas y robos

Durante la intervención, y a pesar de haberse producido durante la madrugada, media docena de personas se acercaron hasta las puertas de la propiedad. En el momento del incendio, la vivienda de Rosario Porto estaba deshabitada, si bien ha trascendido que ante la falta de medidas de seguridad eran habituales las intrusiones nocturnas y hasta se produjo algún robo. El chalé, que tras el crimen, con Rosario Porto y Alfonso Basterra en la cárcel, fue  el objetivo de los cacos, se precintó para evitar una nueva desgracia, teniendo en cuenta la inestabilidad de las estructuras.