Cataluña tendrá que votar el día de los enamorados si no aparece una alternativa a Torra
ACTUALIDAD
Roger Torrent provoca un nuevo choque entre ERC y Junts al anunciar la fecha de las elecciones sin consultar a sus socios
03 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Tras la inhabilitación de Quim Torra, la política catalana busca una salida al laberinto. El presidente de la Cámara catalana, Roger Torrent (ERC), arrojó este viernes algo de luz al apuntar la posible fecha de las elecciones. Salvo sorpresa o quiebros de última hora, muy propios en los últimos años en Cataluña, los catalanes serán llamados a votar el próximo 14 de febrero.
Será un año después de que Torra anunciará en el mes de enero pasado que la legislatura estaba agotada porque se había quebrado la confianza entre los dos socios independentistas. El estallido de la pandemia y las presiones de Carles Puigdemont llevaron al ya expresidente a aparcar el adelanto electoral. La fecha que manejaba era el 4 de octubre. Después de su condena y posterior cese, el Govern ha perdido la prerrogativa para fijar la fecha electoral y la convocatoria será automática, de acuerdo a lo que establece la ley para los supuestos en los que el presidente está inhabilitado. «Si no hay investidura en el Parlament, iremos a elecciones», afirmó Torrent en Rac-1.
Ronda de contactos
ERC no quiere sorpresas y el presidente de la Cámara ya ha activado la ronda de contactos para la búsqueda de un candidato. Tiene 10 días hábiles para encontrar un aspirante. Transcurrido ese plazo, bastará con que publique una resolución en el boletín oficial del Parlamento catalán para comunicar que no ha sido posible. Este trámite pone en marcha el plazo de dos meses establecidos por ley antes de la disolución automática de la Cámara autonómica y la convocatoria de elecciones, que se celebran a los 54 días. Con la calculadora en la mano, las elecciones deberían ser el 10 de febrero (miércoles), pero Torrent tiene un pequeño margen para ajustar la fecha a un domingo (14).
JxCat y ERC ya han asegurado que no propondrán ningún candidato, por lo que no debería haber sorpresas, salvo que Ciudadanos decida presentar a Carlos Carrizosa. La formación naranja no aclaró este viernes sus intenciones. Y aunque Carrizosa forzara una votación de investidura, los plazos no variarían. Torrent, en cualquier caso, podría negarse a convocar una sesión de investidura pues ya ha avisado que solo dará el paso si el aspirante tiene «posibilidades reales» de salir elegido. Dice que le ampara un informe de los letrados del hemiciclo. «No podemos ir a una investidura fallida», afirmó Torrent.
Jugada de Junts
El aviso no solo iba para Ciudadanos. En ERC llevan tiempo con la mosca detrás de la oreja ante el temor de que JxCat presente un aspirante a la investidura para poner en un brete tanto a Esquerra como a Torrent. Un voto en contra de los republicanos al candidato de JxCat o la negativa de Torrent a convocar un pleno para la elección de un aspirante postconvergente -si no le apoyan ERC y la CUP- pondría de cara la campaña a los de Puigdemont.
Los dos socios se marcan muy de cerca. Este mismo viernes, desde JxCat cargaron contra Torrent, a quien no perdonan no haber permitido la investidura telemática de Carles Puigdemont y haber acatado la suspensión como diputado de Torra. La consejera de Presidencia, Meritxell Budó (JxCat), criticó al dirigente republicano por no haber comunicado el anuncio al Govern antes de hacerlo público en un medio de información. «No es normal que haya esta falta de comunicación entre el Parlament y el Govern», reprochó. «Pero estoy segura de que tendremos las explicaciones oportunas de por qué ha pasado esto», remató. Laura Borràs añadió leña al fuego y dijo que la fecha se tendría que haber pactado entre las dos formaciones.
En Esquerra llevan días asegurando que la fecha es cuestión de «matemáticas» y nada más. Pero hay una cuestión relevante, como es que Oriol Junqueras podría participar en la campaña, a partir del 30 de enero, que es cuando cumple una cuarta parte de la condena y podrá empezar a disfrutar de más permisos. JxCat lanzó la campaña en plena conmemoración del tercer aniversario del referéndum ilegal del 1-O. Los posconvergentes pusieron sobre la mesa la propuesta de convertir los comicios en un plebiscito y activar de nuevo la vía unilateral si el independentismo supera el 50 % de los votos. ERC no está de acuerdo, aunque sí se fija como objetivo que el secesionismo llegue a la mitad más uno de los votos.
El 57 % de catalanes priorizan la gestión al «procés»
Un 56,6 % de los catalanes consideran que la Generalitat debe tener como prioridad la gestión de los servicios públicos que son de su competencia y solo el 39,9 % creen que debe centrarse en resolver el problema político entre Cataluña y el Estado, según una encuesta del Centro de Estudios de Opinión (el CIS catalán). Las preferencias se han invertido con respecto al 2019, cuando el 56 % de los catalanes veían como prioritaria la resolución del problema político.
La fecha elegida permitirá al convicto Oriol Junqueras participar en la campaña electoral
El convicto Oriol Junqueras, condenado a 13 años de cárcel por delitos de sedición y malversación, podría participar en la campaña electoral si las autonómicas catalanas finalmente se celebran el domingo 14 de febrero, ya que a partir del 30 de enero el presidente de ERC podrá obtener permisos penitenciarios, hasta un máximo de 36 días al año.
Si los comicios fuesen efectivamente el 14 de febrero, la campaña electoral arrancaría el viernes 29 de enero y se alargaría hasta el 12 de febrero.
En este caso, ERC podrá contar con Junqueras, preso en la cárcel de Lledoners (Barcelona), donde cumple una condena de 13 años, pero que a partir del próximo 30 de enero podrá ya obtener permisos penitenciarios, al haber cumplido una cuarta parte de la pena, según explicaron fuentes jurídicas consultadas por Efe.
Los permisos de hasta dos días que Junqueras solicite deberán ser aprobados por el Servicio de Clasificación de la Secretaría de Medidas Penales del Departamento de Justicia de la Generalitat (que dirige la consejera Ester Capella, de ERC), previo informe de la junta de tratamiento de la cárcel de Lledoners, mientras que las salidas de entre tres y siete días requieren el aval del juzgado de vigilancia penitenciaria.
Por su parte, el exconsejero Josep Rull, también preso en Lledoners, ya puede obtener desde este viernes permisos penitenciarios, al cumplir una cuarta parte de la condena de diez años y medio que le impuso el Tribunal Supremo por su papel en el otoño secesionista del 2017.
El espacio posconvergente trata de ordenar su caos de siglas de cara a los comicios
Después de una semana marcada por la inhabilitación del ya expresidente Quim Torra, JxCat clausura este fin de semana su largo proceso congresual con la aprobación de las ponencias política y organizativa, claves para preparar la candidatura posconvergente para las próximas elecciones, según informa Efe.
Este sábado, los inscritos al congreso podrán votar las ponencias que se han ido debatiendo y enmendando estas últimas semanas, antes de que el domingo por la mañana tenga lugar el acto de clausura, con las intervenciones de Carles Puigdemont, Elsa Artadi, y del presidente de la mesa del congreso, el exconsejero Lluís Puig.
Puigdemont y su entorno impulsaron el nuevo partido sin esperar a un acuerdo con el PDeCAT,el heredero de la antigua CDC, del que el expresidente y buena parte de los cargos más relevantes de JxCat han decidido darse de baja.
El PDeCAT, presidido por David Bonvehí, contraatacó llevando a los tribunales a JxCat por la apropiación de la marca Junts per Catalunya, un movimiento que provocó la ruptura entre ambos partidos, que hasta ahora pertenecían al mismo espacio posconvergente.
La brecha es profunda y puede ser mayor si los asociados de JxCat descartan este sábado la doble militancia, lo que forzaría inevitablemente a todos aquellos que aún no lo han hecho a tener que escoger entre Junts o el Partit Demòcrata.
También el Partit Nacionalista
Otra formación nacida de las ruinas de Convergencia es el Partit Nacionalista de Catalunya (PNC), que el día 23 elegirá a su candidato a la Generalitat en un proceso de primarias, con su secretaria general, Marta Pascal, como favorita.
Esta formación aglutina a perfiles soberanistas moderados escindidos del PDeCAT, como la propia Marta Pascal.
El PP dice que una coalición con el PSC y Ciudadanos «sería un cacao para los votantes»
El presidente del PP en Cataluña, Alejandro Fernández, dijo este viernes que no descarta una coalición constitucionalista con Ciudadanos, y asegura que desde el PP están dispuestos a buscar esta fórmula si suma votos, aunque le «plantea dudas».
En una entrevista de TV3 recogida por Europa Press, preguntado por una posible coalición con Ciudadanos de cara a las elecciones catalanas en febrero del 2021, Fernández señaló que en estos momentos surgen varios interrogantes: «¿Cómo interpretaría el electorado una coalición Cs-PP?, porque Ciudadanos en los últimos meses está mucho más cerca del PSC que del PP».
Fernández sí descartó por completo la posibilidad de formar parte de una alianza con el PSC, ya que una coalición implica ir a las urnas con unas siglas: «Y al mezclar las siglas del PSC con las del PP, yo creo que los electores pueden acabar teniendo un cacao importante».
Sobre el carácter de las elecciones, Fernández se mostró de acuerdo con el planteamiento de Esquerra de que «no serán elecciones plebiscitarias», ya que, según subrayó, en estos momentos el electorado tiene otras prioridades sobre la mesa.