Defiende que no hay otro modo de garantizar la conectividad de Bélgica
25 ago 2020 . Actualizado a las 08:58 h.El rescate estuvo mucho tiempo en el aire, pero finalmente se ha consumado: Brussels Airlines recibirá una inyección de 390 millones de euros para seguir sobrevolando el cielo belga. Lo ha confirmado esta mañana la Comisión Europea, tras dar su visto bueno a las ayudas públicas que desplegará el Gobierno para que la compañía, filial del grupo SN Airholding (en manos de Lufthansa), siga operando.
La ayuda consistirá en un préstamo de 287 millones de euros a tipos de interés bonificados y una inyección de fondos propios de 3 millones. A cambio, el Estado belga recibirá «una remuneración suficiente por el riesgo que corren sus contribuyentes» y la ayuda irá acompañada de «restricciones destinadas a limitar las distorsiones de la competencia». Esas restricciones se presumen menos duras que las que se impusieron a la alemana Lufthansa a cambio de su rescate multimillonario y panaeuropeo de 9.000 millones de euros.
Bruselas justifica la decisión alegando que «desde el inicio de la pandemia de coronavirus, Brussels Airlines y, de forma más general, el grupo SN han sufrido la importante reducción de sus servicios, lo que ha provocado un aumento de las pérdidas operativas y una importante escasez de liquidez». La operación no ha estado exenta de controversias. El grupo alemán presionó al Gobierno belga para que desembolsara el dinero, pero el Ejecutivo retrasó la inyección hasta tener garantías de que Bruselas no quedaría desconectada de las principales rutas europeas. Temían la competencia desleal de otros aeropuertos alemanes gracias al voluminoso rescate a Lufthansa, del que se descontará este sobre para Brussels Airlines.
