Aragonès justifica el pacto ofreciendo a su partido como «rompehielos» para el desbloqueo
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«La nueva etapa política solo se puede abrir si la política desplaza a la represión, ¿se entiende?». El coordinador nacional de ERC, Pere Aragonès, interlocutor clave con el Gobierno, endureció el tono ante la militancia con una explícita advertencia al PSOE de que no renuncian a sus exigencias ni al lenguaje que cuestiona el Estado de derecho en España pese a las prisas de los socialistas por llegar a un acuerdo que permita una rápida investidura de Pedro Sánchez. Aunque reivindicó el derecho de autodeterminación, señaló que ERC está dispuesta a «abrir caminos muy amplios por los que puedan pasar todos los catalanes». Ante las presiones de los sectores más radicales de su propio partido y de JxCat, justificó un posible pacto con los socialistas presentando a su partido como buque «rompehielos» ante el «muro del Estado» que hasta ahora se negaba al diálogo.
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, defendió también en una intervención por videoconferencia desde Suiza, país al que huyó para eludir la acción de la Justicia, la vía del diálogo. Pero advirtió de que este «no es posible» con «la vulneración sistemática de la libertad de los principales líderes políticos y sociales» y «sin una amnistía para tanta injusticia». La ponencia aprobada plantea tres vías para lograr un referendo: pactarlo y negociarlo con el Estado; «forzar» al Estado a aceptarlo con la movilización y la desobediencia civil, o celebrarlo sin el permiso del Estado, aunque sin mencionar la independencia unilateral. Defiende la autodeterminación, pero añade que «habrá que estar atentos a posibles nuevos escenarios que nos permitan transitar hacia la independencia por cualquier camino democrático y pacífico».