Duran i Lleida: «El poder decisivo está en la calle porque las instituciones catalanas no funcionan»
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«El diálogo tiene que implicar a toda Cataluña y a toda España, si no, no habrá una solución duradera»
23 nov 2019 . Actualizado a las 09:02 h.Josep Antoni Duran i LLeida (Huesca, 1952), expresidente de Unión Democrática de Cataluña y exportavoz en el Congreso, está alejado de la primera línea de la política -«solo soy militante de base de Units per Avançar», afirma-, pero este abogado y periodista sigue con pasión la actualidad. Reivindica con insistencia un diálogo entre todas las fuerzas catalanas y después otro con el resto de todas las españolas.
-¿Cataluña está peor, igual o mejor que en el 2017?
-Está peor. Entonces lo grave fue la violación de la Constitución y el Estatuto, la aprobación de las leyes [de desconexión] del 6 y 7 de septiembre y el referendo. Ahora Cataluña está sin salida y nadie es capaz de articular una propuesta. La sentencia del Supremo y la violencia lo han agravado. La frustración deriva en violencia, y la hay porque se ha mentido mucho.
-¿Se ha pasado de la revolución de las sonrisas a la del adoquín?
-Hay un contingente importante de independentistas que son pacíficos y que no tienen nada que ver con la violencia del adoquín. Y un sector minoritario que es violento. Pero la violencia no solo es tirar adoquines, lo es también interrumpir el tráfico y vulnerar los derechos de los demás. La primera perjudicada es Cataluña, pero también el resto de España. A ambas les interesa buscar una solución.
-¿Cuál ve usted?
-En el contexto de la investidura, podría darse un diálogo entre Generalitat y Gobierno central, pero tiene que pasar primero por existir entre las fuerzas catalanas. Y cuando nos hayamos puesto de acuerdo entre los catalanes, entonces se podrá pasar a un diálogo con el resto, que tiene que implicar a toda Cataluña y a toda España, si no, no habrá una solución duradera.
-En el marco de la Constitución.
-En el marco de la Constitución, y que podría comportar tener que reformarla, pero hay que saber muy bien qué y que tenga un apoyo muy amplio.
-¿Con el referendo se buscó manipular a la ciudadanía?
-Un referendo no es la panacea de la democracia y menos sobre todo en situaciones tan polarizadas como la catalana y la del brexit. Tendrá que haber una consulta pactada, pero primero habrá que ponerse de acuerdo en qué hacer. -En una encuesta de la Generalitat, los catalanes valoran mejor a la Guardia Civil y a la Policía Nacional que al Gobierno y al Parlamento autonómicos.
-Está claro que la ciudadanía no valora bien las instituciones catalanas porque no funcionan. El poder decisivo está en la calle, en la ANC y Òmnium, y quien dirige el país no es el Gobierno, que no gobierna, ni el Parlamento, que no funciona. Estamos perdiendo las instituciones y no me extraña que no se las valore positivamente.
-¿Prevé un adelanto electoral?
-Es difícil prever algo en Cataluña. Las elecciones se harán cuando a Puigdemont le interese. Torra solo es su peón. Es necesario convocarlas, pero dependerá de la situación de Torra en el Tribunal Superior de Justicia, y de la de Puigdemont en el de Luxemburgo.
-Defíname «procés».
-Es la política que ha desestabilizado España, no hay debate español, solo catalán. En el comportamiento electoral se ve la subida de Vox por, entre otras cuestiones, los incendios en Barcelona y cortes de carreteras. El procés condiciona toda la política española y la economía.
-Y ha convulsionado los partidos: Unió, Cs, Vox...
-Hace seis años, ya dije que Cataluña no sería independiente, CiU y PSC se romperían y ERC sería hegemónica. Todos cometemos errores, pero Rivera se equivocó. Su destino era ser bisagra y gobernar con la izquierda o con la derecha para moderarlas, pero quiso liderar la derecha y los ciudadanos le han castigado por no ayudar a un Gobierno moderado.
-¿Es posible una gran coalición?
-Al estilo de Alemania, la veo difícil. Y no veo un Gobierno de PSOE y Unidas Podemos para cuatro años. Ese no será un Gobierno muy estable, dependiendo de apoyos parlamentarios como los de ERC y de otros que estarán incómodos y también pedirán cosas.
-Han copiado las prácticas de CiU
-CiU era una fuerza que solicitaba al Gobierno cuestiones que afectaban a Cataluña, pero tenía propuestas para toda España, como la lucha contra la morosidad para que el empresario cobrase a tiempo, planes fiscales de mecenazgo... Ahora bien, si Teruel exige el AVE y lo logra es posible que salgan otros como Ourense existe. Normal. Es la España vaciada. Yo soy de Huesca y sé lo que significa eso.