Duque exige a Maduro que abandone las «bravuconadas»
07 sep 2019 . Actualizado a las 09:39 h.En la escalada verbal de tensiones entre Venezuela y Colombia, Nicolás Maduro volvió a anunciar el despliegue de tropas y misiles a lo largo de la frontera con su vecino, mientras el presidente colombiano, Iván Duque, lo acusó de desatender a su país y le recomendó: «En vez de comprar misiles, que compre comida para su pueblo».
«Ya las tropas están desplegadas», dijo el mandatario venezolano en cadena obligatoria de radio y televisión, al tiempo que acusó a Colombia de querer agredir a Venezuela «para ir al Consejo de Seguridad de la ONU a armar un show político barato a costa de un conflicto armado».
Las tensiones entre el régimen chavista y su vecino se incrementaron a raíz de la decisión de una fracción de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de regresar a las armas. Bogotá ha denunciado que detrás de la decisión están el régimen de Maduro y Cuba, algo que el jefe de Estado venezolano ha rechazado, señalando que Venezuela «solo quiere la paz para Colombia», y acusando a Duque, como lo hace la fracción de las FARC, de incumplir los acuerdos de paz suscritos en el 2016 con la mediación de Noruega.
«Colombia no agrede a nadie», señaló Duque. «Que se deje de bravuconadas, de hablar de misiles: en lugar de gastarse la plata en misiles, que proteja al pueblo venezolano y le dé comida», indicó el presidente colombiano, quien ratificó sus denuncias sobre la presencia de guerrilleros de las FARC y el Ejercito de Liberación Nacional en territorio venezolano a lo largo de los 2.219 kilómetros de frontera común. En este límite la Fuerza Armada Nacional venezolana se ha desplegado en «alerta naranja», según Maduro y su número dos, Diosdado Cabello, quien ha señalado que si Colombia agrede a Venezuela «habrá una respuesta militar». Sin embargo, según la experta venezolana en defensa Rocío San Miguel, el término alerta naranja no existe en los manuales de la Fuerza Armada del país.
En diciembre, Maduro levantó la alarma en la región con la llegada de aviones y tropas de la Federación Rusa, cuyo trabajo, según el canciller ruso Serguéi Lavrov, era poner a punto los sistemas de misiles S-300, adquiridos por Hugo Chávez a finales de la década pasada, cuando Venezuela era el principal comprador de armamento ruso.
Colombia, no obstante, se ha mostrado contundentemente en contra de una posible intervención militar estadounidense que deponga a Maduro, a pesar de ser el principal aliado de EE.UU. en la región y de que la potencia norteamericana nunca ha descartado la opción de la fuerza militar para salir del principal problema geopolítico de la región.