Pedro Sánchez supera a Rajoy en días al frente de un Gobierno en funciones
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El líder socialista suma ya 126 jornadas sin ser investido presidente del Ejecutivo
01 sep 2019 . Actualizado a las 08:51 h.La inestabilidad política suma hoy un nuevo capítulo. Este domingo se cumplen 126 días de las elecciones del 28 de abril, cuando el PSOE logró superar en las urnas a un PP que obtuvo el peor resultado electoral de su historia. Los socialistas confiaron la investidura de Pedro Sánchez en los partidos que apearon a Mariano Rajoy del cargo en la moción de censura, pero el plan fracasó al llegar al Congreso sin los apoyos necesarios. El líder socialista continuó así una Presidencia en funciones que hoy ha superado la de su antecesor.
Rajoy había necesitado 125 días para contar con los votos suficientes de la cámara e iniciar su tercer mandato a finales de octubre del 2016, cuatro meses después de resultar vencedor de unas elecciones que habían tenido que repetirse, tras unos comicios celebrados en diciembre que, cada vez más, recuerdan a la última cita de los españoles con las urnas. Entonces aparecieron Podemos y Ciudadanos en el tablero político, desajustando el sistema bipartidista que había asentado una democracia con pocos sobresaltos. Esa suerte de turnismo entre los dos grandes partidos colocaba a España como uno de los países europeos que menos días necesitaban para formar gobierno, con una media de un mes entre la fecha de las elecciones y la de la sesión de investidura en el Congreso de los Diputados.
El expresidente popular necesitó, a partir de junio, 125 días que sentaron un hito sin precedentes hasta la fecha. Sánchez supera hoy a Rajoy con un horizonte mucho menos claro. El contador seguirá sumando hasta, al menos, el 23 de septiembre. Ese lunes termina el plazo de dos meses que da la Constitución a los grupos parlamentarios para investir a un candidato tras el primer intento frustrado ?en este caso, el pasado 25 de julio?. Ese día, se cumplirán ya 148 de Gobierno en funciones.
Veinte días de cuenta atrás
La actividad vuelve al Congreso en esta primera semana de septiembre tras el pleno extraordinario celebrado por la crisis migratoria abierta con el Open Arms. La Junta de Portavoces se reunirá este miércoles para fijar un calendario que tiene marcado en rojo el lunes 23.
Sánchez prevé reunirse con el PNV y el Partido Regionalista Cántabro para tantear su confianza en una sesión de investidura que solo se celebrará en caso de que el candidato socialista llegue a la fecha con los votos necesarios para resultar elegido, según confirmó la portavoz Isabel Celáa este viernes.
La próxima semana se espera que Sánchez celebre un encuentro con el líder de Unidas Podemos en busca de un acuerdo que, a día de hoy, parece imposible. El pleno del Open Arms sirvió para que el socialista Rafael Simancas acusase a los de Pablo Iglesias de que «no son de fiar», a lo que siguió horas después el deseo de iniciar la campaña electoral expresado en voz alta por el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos. Desde Unidas Podemos, Pablo Echenique se encargó de oscurecer el camino hacia la investidura en septiembre al publicar en su cuenta de Twitter que «la conclusión es triste pero difícil de negar: Pedro Sánchez ha decidido no negociar e ir a elecciones».
De ser así y no haber ronda de consultas con el rey ni debate de investidura en el Congreso, las Cortes se disolverán y se convocarán elecciones el 10 de noviembre, siguiendo el mismo camino que inició Mariano Rajoy a finales de diciembre del 2015.
El cuarto país europeo
Con una media de 94 días, que se incrementa cada día tras la investidura fallida de Sánchez, España es el cuarto país europeo al que más le cuesta formar gobierno en lo que va de década tras Bélgica, Alemania y Países Bajos.
Lo normal entre sus socios europeos es emplear 39 días para investir a su presidente tras las elecciones, influyendo en estos tiempos el número de partidos en el arco parlamentario y la tradición política de pactos. De los 28 países miembro de la Unión Europea, diecinueve están gobernados por al menos dos formaciones con cargos ministeriales.