A «diez minutos» de la guerra contra Irán

carlos pérez cruz WASHINGTON / E. LA VOZ

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El general Ali Hajizade muestra los restos del supuesto dron estadounidense
El general Ali Hajizade muestra los restos del supuesto dron estadounidense MEGHDAD MADADI | EFE

Trump dice que cambió de idea y frenó el ataque al saber que podrían morir 150 personas

25 jun 2019 . Actualizado a las 10:26 h.

Resultaría casi cómico si no fuera porque Estados Unidos estuvo a minutos de lanzar un ataque sobre Irán de imprevisibles consecuencias. Donald Trump aseguró ayer que la madrugada del viernes detuvo el bombardeo de «tres objetivos diferentes» localizados en Irán «diez minutos antes» de que tuviera lugar. La razón, por increíble que parezca, es la siguiente: «Cuando pregunté cuántos morirían», contó Trump, la respuesta que le ofreció un general fue: «150 personas, señor». Puro esperpento. Resulta difícil de creer que en la planificación de un ataque como al que Trump dijo dar marcha atrás el presidente no contara con la información preceptiva sobre sus posibles consecuencias.

El presidente de EE.UU. explicó a través de Twitter que, aunque «estaba todo preparado», consideró que el número de muertos no era «proporcional» al derribo el jueves de un «dron no tripulado» estadounidense por parte de Irán. De hecho, que Irán derribó el aparato es en lo único en que se ponen de acuerdo ambos países. La república islámica asegura que la nave se encontraba dentro del espacio aéreo iraní, mientras que EE.UU. insiste en que volaba dentro del espacio aéreo internacional. Es el último capítulo hasta el momento de una escalada de incidentes que incluye el ataque la semana pasada a dos petroleros en el golfo de Omán, del que la Administración norteamericana responsabiliza a Irán.

La información sobre la marcha atrás en el último momento la adelantó la madrugada del viernes The New York Times. Irónicamente, la primera declaración pública de Donald Trump ayer fue un tuit más contra la credibilidad de este medio a propósito de otro tema. Inmediatamente después, informó (y confirmó) la noticia del diario neoyorquino. El periódico explica que durante las reuniones previas al ataque abortado, el secretario de Estado, Mike Pompeo, defendió que las sanciones impuestas a Irán están teniendo un gran efecto. A pesar de ello, siempre según el diario, Pompeo abogó por un ataque como respuesta al derribo del dron. Un funcionario de la Administración, bajo condición de anonimato, apuntó a que otra posible razón, diferente a la esgrimida por Trump para recular, es que existen dudas reales dentro de la Casa Blanca sobre si algún avión estadounidense violó o no el espacio aéreo de Irán.

Como consecuencia de los acontecimientos, la Administración Federal de Aviación de EE.UU. emitió una orden prohibiendo a la aviación estadounidense volar sobre el golfo pérsico y el golfo de Omán por el incremento de las actividades militares que «ponen los vuelos comerciales en riesgo». Diversas aerolíneas de todo el mundo han cancelado sus vuelos en espacio aéreo iraní. EE.UU. ha solicitado una reunión el próximo lunes del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la situación.

La república islámica se reserva el «derecho» a defenderse ante una acción bélica

Irán ha presentado sus pruebas tanto al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, como al embajador de Suiza en Teherán (que representa los intereses de EE.UU. en un país con el que cortó lazos en 1979). En una carta a Guterres, Irán indica que «no busca la guerra», pero «se reserva el derecho inherente, en virtud del Artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas, a tomar todas las medidas necesarias contra cualquier acto hostil que viole su territorio».

Si a Trump le preocupaba el coste en vidas de su ataque frustrado a Irán, Teherán tuvo también aparentemente su gesto de misericordia. Según el general Amir Ali Hajizade, comandante de la Fuerza Aeroespacial de la Guardia Revolucionaria (incluida recientemente por EE.UU. en su lista de grupos terroristas), además del dron, un avión militar estadounidense «con 35 personas a bordo» entró en su espacio aéreo. «Podríamos haberlo derribado, pero no lo hicimos», dijo. Ali Hajizade añadió que dieron «repetidos avisos» al dron antes de derribarlo con un misil tierra-aire. La televisión iraní mostró ayer los restos del supuesto dron y un vídeo que, aseguran, corresponde al momento del derribo. «Que Irán posea partes del avión no tripulado demuestra que este había violado el espacio aéreo iraní», concluyó.