El mensaje viral de un médico a un político contrario a las vacunas obligatorias que fue hospitalizado por varicela
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Massimiliano Fedriga, de la Liga Norte estuvo ingresado durante unos días; el virólogo Roberto Burioni le lanzó sus reflexiones en las redes sociales: «Si fuera un niño trasplantado, probablemente estaríamos llorando su muerte, podría haber golpeado a una persona mucho más vulnerable»
18 mar 2019 . Actualizado a las 16:45 h.Massimiliano Fedriga, gobernador del Friuli, tuvo que ser hospitalizado durante unos días para recuperarse de la varicela. El político, de 38 años, milita en la Liga Norte y, al igual que otros cargos de esta formación de ultraderecha, se opone a la vacunación obligatoria impulsada por el anterior Gobierno italiano mediante la ley Lorenzin y que fue retrasada por el nuevo Ejecutivo del que forma parte este partido. El propio Matteo Salvini es uno de los que han batallado contra esta norma que exige a los niños de Italia estar vacunados para poder matricularse en colegios y guarderías.
Fedriga afirmó que ya se encuentra bien, está en casa recuperándose y agradeció el interés de todos los que se han interesado por él. Él ha lanzado duras críticas contra la inmunización por ley, considerando la medida «una dictadura» que no lograría convencer a las familias antivacunas. Aunque, por otra parte, también dijo que él tomó la decisión de vacunar a sus hijos.
El virólogo Roberto Burioni, muy beligerante contra los antivacunas y las pseudociencias, lanzó un contundente mensaje a Fedriga en las redes sociales: «Querido presidente, primero permítale desearle una pronta recuperación. Me alegra que haya vacunado a sus hijos; desafortunadamente, la varicela no solo es muy contagiosa (y peligrosa), sino que incluso la transmiten los pacientes antes de que aparezcan los síntomas. Usted, como muchos adultos, no se vacunó (cuando era pequeño esta vacuna no existía): si hubiera sido vacunado en su edad adulta, estaría en perfecto estado de salud, ya que la vacuna tiene una eficacia de entre el 88 y el 98 %», le indica.
Burioni prosigue: «Recuerde que si el virus, en lugar de haberlo infectado a usted, hubiera alcanzado a un niño trasplantado, probablemente estaríamos aquí para llorar su muerte; si hubiera infectado a una mujer embarazada, nos enfrentaríamos a un niño malformado o a un aborto. La única manera de evitar estas tragedias (porque son tragedias) es vacunándonos todos para evitar la circulación de este virus peligroso que, como lo hizo, podría haber golpeado a una persona mucho más vulnerable. Hay algunos que reaccionan violentamente contra aquellos antivacunas que ponen en peligro en nombre de la ignorancia y el egoísmo (porque esto es lo que es, no la libre elección) las vidas de otros. Pero no se puede poner en el mismo nivel al que grita demasiado y a los que gritan mucho mientras conducen borrachos. Buena suerte».