El ministro pide un decreto que demore de nuevo la medida, que entra en vigor el 10 de marzo
08 mar 2019 . Actualizado a las 08:08 h.El líder de la ultraderechista Liga y vicepresidente del Gobierno italiano, Matteo Salvini, se volvió ayer a poner de lado de las familias que no vacunan a sus hijos y se ha enfrentado esta vez a la ministra de Sanidad, Giulia Grillo, del antisistema Movimiento Cinco Estrellas, su socio en el Ejecutivo. Salvini envió una carta a la ministra para pedirle un decreto-ley urgente que permita a los niños no vacunados de entre 0 y 6 años seguir en la escuela y guarderías, ya que a partir del 10 de marzo ya no será posible por ley, una normativa que ya tenía que haber entrado en vigor el pasado curso, pero que se aplazó por las discrepancias entre los partidos del Gobierno.
El anterior Gobierno del Partido Demócrata (PD, centroizquierda) obligó por ley a que los padres inmunizaran a sus hijos con diez vacunas y estableció que a partir del 2018 los niños que no estuvieran vacunados no podrían entrar en las escuelas.
Pero el actual Ejecutivo, formado por la Liga y el Movimiento Cinco Estrellas, incapaz de ponerse de acuerdo, aprobó en septiembre ampliar el plazo de esta prohibición hasta el próximo 10 de marzo para que los padres se pusieran al día con sus hijos.
En su carta, el también ministro del Interior reclamó «el aplazamiento de las obligaciones que vencen el 10 de marzo» para «asegurar la permanencia de los niños en las escuelas, evitando el alejamiento y la exclusión en las listas escolares», según informa la agencia Efe. «Estoy seguro de que tu sensibilidad para evitar traumas a los más pequeños le dará a la presente petición la máxima atención para la resolución del problema», añade Salvini.
Grillo eludió la petición del líder de la Liga de ampliar el plazo y se limitó a decir que «la intención común» del Gobierno es «superar el decreto Lorenzin» -llamado así por la anterior ministra de Salud, Beatrice Lorenzin-, que tiene «algunas lagunas importantes».
No habrá excepciones
«Tenemos un contrato que estamos respetando con una ley en discusión en este momento en el Senado y estoy convencida de que probablemente en abril conseguiremos aprobarla en la Cámara de Diputados y, por lo tanto, tendremos una nueva ley que supere la ley Lorenzin», señaló la ministra. Sin embargo, el subsecretario de Salud, Armando Bartolazzi, fue más tajante y, en declaraciones a la agencia Ansa, dijo que el ministerio «no está dispuesto a hacer extensiones innecesarias», por lo que «la ley sigue en vigor para el 10 de marzo y las familias deberán presentar las certificaciones de vacunación de sus hijos». La obligatoriedad de las vacunas en los menores es un debate muy polémico en Italia, un país que sufre de forma recurrente brotes de sarampión.