El modisto alemán, artífice del relanzamiento de Chanel y de casas como Chole o Fendi, fallece en París a los 85 años
19 feb 2019 . Actualizado a las 22:28 h.Cuando el debate sobre su sucesión al frente de Chanel estaba en el aire, el Kaiser usó su vehemencia y no dudó en sentenciar: «Soy inmortal, esa pregunta resulta innecesaria». No lo era. Karl Lagerfeld, el modisto alemán que obró el resurgimiento de Chanel, maison de la que fue director creativo desde 1983, revivió Chloe y Fendi e incluso creó una marca con su nombre, falleció en París a unos supuestos 85 años, aunque él nunca confesó su fecha de nacimiento.
Las primeras alarmas sobre su estado de salud saltaron en noviembre. Durante el encendido de las luces de Navidad de París apareció con varios dientes menos, pero cuando no apareció en el desfile de presentación de la colección primavera-verano de Chanel el pasado mes de enero, muchos en el mundo de la moda empezaron a pensar que nada bueno le parecía estar pasando. No se equivocaban. Hoy el mundo de la moda llora a uno de sus diseñadores más reconocidos, por algo comenzó como asistente de Pierre Balmain, justo antes de trabajar en alta costura con el mismo Jean Patou.
Las alarmas comenzaron a saltar hace un mes, cuando el modisto no acudió a un desfile de la firma francesa por primera vez en sus 35 años de director creativo. Los rumores sobre su salud comenzaron a extenderse mientras la organización lo resolvía con un mensaje a través de la megafonía en el que aseguraba que el diseñador «se sentía cansado». Poco después la firma difundía un comunicado oficial que confirmaba el bache físico de Lagerfeld.
A pesar de todo, el genio de la creación nunca pensó que pudiese haber un sucesor ni se planteó la jubilación. «Hago doce colecciones al año y no veo muy bien quién podría hacerlo en mi lugar, aunque a muchos les gustaría», aseguraba en una entrevista a Paris Match.
Karl Lagerfeld fue uno de los creadores más importantes del siglo XX. Comenzó con una carrera independiente en la que colaboró con firmas como Chloé, Fendi y Chanel. Además, en los 80 fundó su propia marca, llamada Lagerfeld, con la que lanzó perfumes y líneas de ropa. Su figura está rodeada de un halo de esnobismo, y es conocido por su gusto y costumbres elitistas, Sin embargo, quienes trabajaron cerca del creador aseguran que su calidad humana y su generosidad eran enormes. Aunque le gustaba la polémica. A principios de la década de 1990 eligió a nudistas y a una estrella italiana de filmes eróticos (Moana Pozzi) para que desfilasen con su colección Blanco y negro para la firma Fendi. A las críticas contra Pozzi, Lagerfeld respondió: «Las mujeres comunes caminan como Moana y como modelos al 50%».
En 1982 fue nombrado director artístico de Chanel. En su momento, el diseñador aseguró que se había encontrado con una marca polvorienta que sobrevivía gracias al a venta de perfumes pero sin ningún interés desde el punto de vista de la moda. Nadie le aconsejó que se hiciese cargo del proyecto, pero él aceptó. A partir de ahí la firma vivió varias décadas de gloria gracias al talento y la insaciable creatividad del autor. Ahora se enfrenta al reto de mantenerse sin el genio que le devolvió la vida.