Este labrador llegó a la vida del expresidente para proporcionarle apoyo en sus actividades diarias tras la muerte de su mujer
03 dic 2018 . Actualizado a las 19:25 h.George H. W. Bush falleció el pasado viernes a los 94 años, tan solo ocho meses después de la muerte de su mujer Bárbara Bush tras 73 años de matrimonio. La pérdida de su esposa y el alzheimer que padecía le dejó en una situación muy delicada en los últimos años, obligándole a ir en silla de ruedas los últimos años de su vida. El pasado mes de junio, Sully llegó a su vida para proporcionarle apoyo en sus actividades diarias tras ser entrenado por VetDogs, una organización que prepara a estos animales para ayudar a veteranos del ejército.
Desde que llegó a su vida, el expresidente y este labrador se convirtieron en inseparables y el can ha cumplido su misión hasta el último momento, tal y como ha afirmado el portavoz de los Bush, Jim McGrath, al publicar una foto a los pies del féretro del expresidente tras su muerte: «Misión cumplida», escribió junto a la conmovedora imagen.
El propio hijo del presidente, George Bush, también quiso compartir la foto del perro a los pies del féretro de su padre, agradeciéndole su labor. «Por mucho que nuestra familia vaya a echar de menos a este perro, nos reconforta saber que llevará a su nuevo hogar la misma alegría que trajo al presidente 41», señaló al expresidente de los Estados Unidos.
Sully está entrenado para realizar múltiples tareas, incluyendo descolgar el teléfono o ayudar a encontrar objetos. «Como alguien dijo, él puede hacer casi cualquier cosa, excepto prepararte un martini. Pero no te preocupes, él puede ir a conseguir a alguien que te lo prepare», destacó McGrath. En una de las últimas imágenes del expresidente hace unas semanas cuando acudía a votar, se pudo ver al can aguardando a su compañero. Tal ha sido el arraigo entre ellos que también ha viajado con él en el avión presidencial hasta Washington donde ha recibido sepultura.
El futuro próximo de este labrador estará lejos de la familia Bush a partir de ahora, puesto que volverá al centro VetDogs, donde permanecerá durante la Navidad para luego ser trasladado al Programa de perros del Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en Maryland. Sully fue bautizado con este nombre en honor al expiloto Chesley B. Sullenberger, apodado Sully, y que salvó la vida de 155 personas en el 2009 al ser capaz de aterrizar un avión en el río Hudson.