Los críticos de IU denuncian que se lamina al que «no sea un garzoner» en las listas

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Alberto Garzón, expone ante la Asamblea Político y Social (APS) de su organización las condiciones que recogerá el acuerdo con Podemos para concurrir en coalición a las elecciones
Alberto Garzón, expone ante la Asamblea Político y Social (APS) de su organización las condiciones que recogerá el acuerdo con Podemos para concurrir en coalición a las elecciones VICTOR LERENA

Diversos sectores han denunciado falta de pluralidad y representación territorial en la elaboración de la candidatura a las elecciones europeas

07 nov 2018 . Actualizado a las 16:21 h.

Los tres principales sectores críticos de IU han criticado la candidatura impulsada por la dirección federal para las elecciones europeas por su falta de «pluralidad» y la «laminación de cualquiera que no sea un garzoner» --en alusión a los que simpatizan con el coordinador federal, Alberto Garzón--.

Asimismo, han cargado contra el proceso de primarias que ha diseñado la dirección federal para ratificar la lista ya que, a su juicio, no es más que una «caricatura de participación», que además consuma la «subordinación» a Podemos.

La lista propuesta por la cúpula de IU, que tiene de número uno a la dirigente federal Sira Rego y no incluye a ninguno de los actuales eurodiputados, es la única que competirá en esas primarias ante la falta de otras candidaturas, tal y como informó este lunes la dirección.

De hecho, la corriente a la que pertenece la eurodiputada Paloma López, '+Izquierda' (antes 'IU sí; con más fuerza'), que se enfrentó a Garzón en la última asamblea, decidió no participar en las primarias al considerar que «no existen garantías que impidan que la presencia y la propuesta de IU quede subordinada a la agenda de otras fuerzas políticas».

Según explica en un comunicado este sector crítico, su decisión responde a que no están de acuerdo «en confeccionar una candidatura antes de conocer los elementos esenciales del acuerdo de confluencia con otras fuerzas políticas».

«No existe todavía un programa electoral conjunto para las elecciones, por tanto no sabemos si se garantiza la visibilidad de nuestra propuesta política, diferente a la de otros miembros de la confluencia y cual va a ser el grado de autonomía para llevar a cabo nuestro programa», avisan.

Además, denuncian que «no se ha debatido qué grado de compromiso existe para formar o no, parte de una misma delegación y/o grupo parlamentario» y que «no se tenga en cuenta el respaldo democrático que cada fuerza tuvo en las anteriores elecciones, sacrificando la presencia de candidatos de IU en las candidaturas conjuntas a las elecciones europeas».

En '+Izquierda' también consideran que no se garantiza «un sistema de elección democrático» al desarrollarse unas primarias con las llamadas «listas plancha» --lista cerrada--.

Hoja de ruta de disolución

Por su parte, Izquierda Abierta (IzAb), el partido del diputado asturiano y excoordinador federal de IU, Gaspar Llamazares, cree que las primarias no son más que «una caricatura de participación», en el que además no se ha garantizado «ni la federalidad, ni la pluralidad de la organización, a la vez que ha sido incapaz de aprovechar el momento para impulsar una amplia participación entre sus afiliados y simpatizantes».

«Por todo ello, IzAb considera que la dirección de IU, que es de facto la del Partido Comunista de España (PCE), consuma su estrategia de secuestro de IU para entregar los restos del naufragio de la organización a Podemos», sentencian.

En este sentido, critican que «IU es una fuerza política invisibilizada desde hace años, que simplemente cumple con un trámite estatutario, despreciando la diversidad interna y mostrándose débil en un momento importantísimo para Europa, en un proceso de confluencia con Podemos y Equo donde su proyecto aparecerá claramente ninguneado».

«Ni siquiera se conocen los términos del programa electoral de la confluencia o los criterios acordados para la conformación definitiva de la lista conjunta. Todo es opaco, pero la hoja de ruta de la disolución es clara», recalcan.

Asimismo, el partido de Llamazares aprovecha para denunciar que «desde hace meses viene sufriendo la limitación y persecución interna dentro de IU. El momento político, desde la izquierda, requiere más que nunca de procesos integradores, plurales y participativos para el análisis y las propuestas. Estos procesos, si no se dan en el seno de IU, con el marco encorsetado de sus confluencias, deberán darse en otros espacios a los que IzAb no renuncia y de los que formará parte activa», aseguran.

Maniobra perversa

En cuanto a la corriente denominada 'Coordinadora de militantes independientes' que lidera el diputado en el Congreso Ricardo Sixto ha denunciado que la candidatura «no responde ni a la pluralidad ni a la territorialidad», y se ha confeccionado «sin tener un acuerdo político claro».

Lo más grave, a su juicio, es que no reconoce «el trabajo de los eurodiputados actuales procediendo a su expulsión, sin posibilidad de continuar desarrollando un buen trabajo en una segunda legislatura». «Es inadmisible que la organización no ponga en valor el trabajo que han hecho por y para la organización y menos cuando alguno ya había dicho que quería repetir», ha manifestado.

«Esta es una maniobra perversa que esconde bajo la apariencia de renovación lo que no es más que la laminación de cualquiera que no sea un garzoner. No va a haber eurodiputados que no sean de la estricta confianza del coordinador federal», ha denunciado el diputado Ricardo Sixto.

En este sentido, ha criticado que las primarias que se han diseñado «hacen imposible enfrentarse a la lista plancha de Garzón». «Todo ello envuelto en el celofán del referéndum plebiscitario sin candidaturas alternativas ni la posibilidad de abrir la lista», ha apostillado.

«La verdadera pluralidad y la representación de las minorías han sido eliminadas. Las federaciones que tradicionalmente habían tenido candidatos en puestos de salida pierden ese papel de pluralidad territorial», ha enfatizado Sixto.