La ciudad se llevó la peor parte en una jornada de tormentas en la que 6.000 rayos cayeron sobre Galicia
01 jul 2018 . Actualizado a las 12:58 h.La alerta amarilla por lluvias y tormentas marcó la jornada del sábado en la comunidad gallega. El 112 registró un total de 83 incidencias: 65 en A Coruña, 9 en Pontevedra, 5 en Lugo y 4 en Ourense como consecuencia de las fuertes lluvias y por unas tormentas que dejaron 6.000 rayos.
La peor parte se la llevó la ciudad de A Coruña, en donde en apenas media hora el centro quedó inundado e inaccesible al tráfico rodado. Según la web especializada 4gotas, se llegaron a registrar 20 litros por metro cuadrado entre las 17 y las 17.30 horas. Una cifra que incrementó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que cifró en 38 litros por metro cuadrado el agua caída entre las 17 y las 18.40 horas. A causa de la lluvia intensa se produjeron fuertes inundaciones en las calles más céntricas de la ciudad. Tanto los Cantones como Linares Rivas y Primo de Rivera quedaron anegadas, con casi un metro de agua en varios puntos.
El tráfico se vio muy afectado, ya que las vías principales se convirtieron en auténticos ríos por los que tenían que circular los vehículos. Por este motivo, los servicios de emergencias tuvieron que cerrar el túnel de la Marina e impedir el acceso rodado al centro, para intentar vaciar las calles y evitar otros accidentes.
En Alfonso Molina, la entrada principal a la ciudad, se registraron importantes retenciones por los cortes de tráfico, por lo que las autoridades acabaron desviándolo hacia vías secundarias para liberar ese acceso.
Los comercios fueron los otros damnificados por estas lluvias, que vieron como el agua entraba en sus locales, estropeando mercancía en muchas ocasiones.
Tampoco hubo piedad para edificios emblemáticos como el teatro Rosalía, en el que el agua provocó importantes goteras. Ni para los párkings, con el de los Cantones anegado.
La tormenta afectó también al área metropolitana de A Coruña, donde el Servicio Municipal de Emerxencias e Protección Civil así como la Policía Local realizaron varias salidas por inundaciones en localidades como Sada, Culleredo, Cambre u Oleiros.
A Coruña se llevó la peor parte, pero las tormentas afectaron a prácticamente toda Galicia, que recibió casi 6.000 rayos a lo largo de la jornada, la cifra más alta de la última semana, en la que las tormentas han sido una constante, primero en el sureste y el interior de Galicia, y desde el viernes, en casi todo su territorio.
Aunque en Ourense fueron más intensas las tormentas del viernes, ayer las condiciones meteorológicas obligaron a cambiar el lugar de alguno de los conciertos programados para las fiestas de Ourense.
Sin autocrós
En Carballo hubo fuertes trombas de agua, pero sin incidencias graves. La más significativa fue la suspensión hasta hoy de las carreras del autocrós de Carballo, en el circuito de Bértoa, puntuables para el Campeonato de España. La lluvia convirtió las pistas en lugares impracticables. En la capital de Bergantiños también hubo cortes de luz que se resolvieron pronto.
En la comarca de Deza se anegó el comedor de una residencia de ancianos, que no hubo que desalojar, y hubo desprendimientos en la carretera PO-905 a causa de la lluvia caída.
Por su parte, los bomberos de Ponteareas acudieron a San Xoán de Ribarteme, en As Neves, para achicar el agua desbordada de un riachuelo que inundó caminos y unas tuberías que recogen el agua de la lluvia, pero no afectó a las casas cercanas.
Con información de Maite Rodríguez, Santiago Garrido, E. V. Pita y Rocío García.