Anthony Bourdain ha fallecido a los 61 años. La CNN señala que se trata de un suicidio
08 jun 2018 . Actualizado a las 14:24 h.El conocido chef y crítico gastronómico Anthony Bourdain ha fallecido a los 61 años. Según ha informado la CNN, se trata de un suicidio. El cocinero, una estrella en la televisión estadounidense, presentaba el programa Parts Unknown, en el que recorría el mundo para descubrir sus virtudes a través de la gastronomía. Esa curiosidad fue la que le trajo a Asturias junto al mediático chef asturiano José Andrés durante el pasado mes de abril. Juntos recorrieron distintas partes del Principado para para grabar uno de sus episodios. Estuvieron en Cangas de Onís, Villaviciosa o Avilés para adentrarse en las vicisitudes de la comida casera asturiana. Su edad no parecía un hándicap, ya que, entre comida y comida, incluyo se animó a practicar artes marciales en Lugones.
José Andrés y Bourdain eran buenos amigos. El chef asturiano fue quien le persuadió para que acudiera a Asturias para el rodaje de Parts Unknown, ya que Bourdain ya había visitado otros lugares España como Cataluña o el País Vasco, pero nunca había tenido la oportunidad de conocer Asturias.
Bourdain se encontraba en Francia rodando otro de los episodios de la aclamada serie. Fue uno de sus amigos más cercanos, el chef francés Eric Ripert, quien le halló muerto en la habitación de su hotel esta mañana.
La cadena estadounidense no ha podido evitar despedirse de su estrella. A él dedican cálidas palabras alabando «su amor por la aventura, los amigos y la buena comida», así como destacan su cualidad como un «narrador único». Asimismo, envían fuerza a su familia «en estos tiempos tan difíciles».
El chef era un maestro en su oficio, pero también en los medios, ya que a través de su programa y sus libros supo explorar al ser humano y empujar a la audiencia a repensar sus creencias en cuanto a comida, viajes y hasta sí mismos. Al igual que José Andrés, era un gran defensor de las sociedades más marginales y luchó por mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de los restaurantes. Todo ello le hizo merecedor de prácticamente todos los premios existentes dentro de la industria del espectáculo, entre ellos un Peabody.