El ministro, que hoy se enfrenta a otro paro de jueces y fiscales, recibe el respaldo de unos líderes, críticas de otros y el silencio de Rajoy
03 may 2018 . Actualizado a las 07:15 h.Rafael Catalá empieza a sentir los efectos de la soledad. Pese al acoso de la oposición y de todo el sector judicial, ni siquiera encontró el apoyo que sí le dio su partido en polémicas anteriores. El presidente Mariano Rajoy evitó el asunto durante su estancia en Burgos. Ni el más mínimo comentario de aliento a su ministro de Justicia.
Los únicos, y tibios, apoyos de su partido le llegaron de Javier Maroto y del exministro Alfonso Alonso. El vicesecretario de Política Social dijo que el ministro se limitó a manifestó lo que piensa la gente al criticar el voto particular de Ricardo González y cuestionar la capacidad del juez. Alonso, por su parte, declaró en Radio Euskadi: «Yo he compartido Consejo de Ministros con él y es un hombre serio, profundamente respetuoso de su función en la separación de poderes; yo creo que, como los demás, leyó ese voto particular, y luego debe de saber alguna otra cosa y lo manifestó». Nada más.
Pero si nadie en el PP parece dispuesto a comprometerse en defensa de Catalá, sí los hay que no dudan en criticar sus declaraciones. Como la presidenta del partido en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, quien calificó de error las palabras del ministro. Porque, aunque coincidió con el sentir general de que la sentencia le parece injusta, Buruaga precisó que, como cargo público, «no basta con proclamarse demócrata», sino que hay que ejercer como tal respetando el principio de separación de poderes y de independencia de los jueces.
Paradójicamente, el mensaje más comprensivo le llegó a Catalá de la portavoz parlamentaria del BNG, Ana Pontón, quien calificó de «delirante» y «descorazonador» el que haya partidos que «lo que quieren es reprobar» al ministro cuando lo importante es una sentencia que «agrede» a «la dignidad» de las mujeres. Eso sí, Pontón pidió a Catalá que diga «qué sabe de ese juez». Lo mismo que le han pedido desde otros partidos, a lo que el ministro, no obstante, ha optado por no responder.
Al ministro se le complica también el frente judicial. Jueces y fiscales de toda España están llamados a realizar hoy un paro de una hora, antesala de una huelga prevista para mañana, en el marco del calendario de protestas promovidas por las siete asociaciones representativas del sector en demanda de mejoras en el funcionamiento de la Administración de Justicia, reivindicaciones laborales y profesionales, y una reforma legislativa que garantice la independencia judicial. En los paros de la semana pasada participaron 1.965 jueces y 955 fiscales de toda España, aproximadamente un 40 % de los profesionales.