Mujeres anónimas, pero también del ámbito público, entre ellas periodistas, escritoras y políticas, se han sumado con sus historias o cometarios a la iniciativa
28 abr 2018 . Actualizado a las 15:20 h.Miles de mujeres de distintos ámbitos relatan desde ayer en Twitter los casos de agresión sexual que han vivido, lo que ha convertido en tendencia mundial la etiqueta #cuéntalo, una iniciativa de la periodista Cristina Fallarás.
«He arrancado el día proponiendo el «#cuéntalo» porque creo que CASI TODAS hemos sufrido algún tipo de agresión sexual», escribía ayer Fallarás, unas horas después de que la sentencia que ha condenado a los cinco miembros de la Manada por abuso sexual y no por agresión sexual suscitara movilizaciones de protesta en toda España.
Mujeres anónimas, pero también del ámbito público, entre ellas periodistas, escritoras y políticas se han sumado con sus historias o cometarios a la iniciativa, entre ellas representantes de Podemos como Irene Montero y Teresa Rodríguez, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
«Sentir miedo al volver a casa por las noches: fingir hablar por teléfono o pedirle a una amiga que no cuelgue hasta entrar en el portal, correr nerviosa los últimos metros con la llave preparada. Nos ocurre a todas, ahora lo vivimos en común. No estamos solas», ha compartido la portavoz de Unidos Podemos en el Congreso, Irene Montero.
«Admiro la valentía de las que lo contáis sin tapujos. Yo solamente al recordar aquella historia en la que pude escapar de las fauces de aquel señor tan distinguido y reconocido (y reconocible) todavía siento angustia. Rabia, asco, impotencia», señala la exsocialista Beatriz Talegón.
Por su parte, la periodista Elisa Beni asegura: «en doce horas he recibido mensajes de mujeres que me piden ayuda para denunciar el abuso de hombres poderosos, el incesto, los intentos de abuso laboral... Algo está pasando».
También mujeres anónimas han utilizado la etiqueta «#cuéntalo» para denunciar casos de agresión sexual en su entorno personal o laboral o por parte de desconocidos, así como de acoso y de miedo.