Leticia Dolera: «No tendríamos que llamarlo piropos, sino acoso callejero»

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MARTA PEREZ | EFE

La actriz y directora denuncia el «acoso verbal» que sufren las mujeres cuando van «solas» o en «compañía de otras mujeres»

02 abr 2018 . Actualizado a las 08:05 h.

La actriz y directora Leticia Dolera denunció ayer, en una entrevista en La Sexta Noche, el «acoso verbal» que sufren las mujeres cuando van «solas» o en «compañía de otras mujeres» por la calle. «No tendríamos que llamarlo piropos, tendríamos que llamarlo acoso callejero o acoso verbal porque realmente lo es», subrayó. 

«En cuanto hay un hombre con nosotras ya nadie nos dice nada», destacó. «A mi eso me parece 'superllamativo' de lo machista que es decirle cosas a una mujer que va sola por la calle, porque cuando va con un hombre no le dices nada porque al hombre lo respetas, porque entiendes que la mujer que va con él es de su posesión...¿o qué?», explicó Leticia Dolera

«Hay una 'objetualización' en la agresión verbal callejera que es muy grave», denunció la directora. 

Leticia Dolera admitió que esto genera inseguridad en las mujeres cuando van solas por la calle y reconoció que ella misma se ha sentido incómoda por comentarios o salidas de tono, sobre todo por la noche o cuando llega el verano. «Te pones tirantes porque tienes calor y parece que te pones tirantes para que te digan cosas, cuando no es así», subrayó. 

Algunos gestos, silbidos o comentarios obscenos en un espacio público cuestan caro en algunos países europeos. Bélgica fue el primer país que puso coto a los piropos: desde 2014 se condena con multas entre los 50 y los 1.000 euros, informa Efe. Muy cerca, en Portugal, también se ha legislado sobre el acoso callejero, incluyendo penas de cárcel.

Francia lanzó el pasado mes de septiembre una iniciativa legislativa para prohibir piropos y pretende, también, multarlos. Una medida, la de las multas, que el Gobierno francés anunció hace unas semanas subrayando que en la región de la Isla de Francia (donde se engloba París) hasta el 90% de las mujeres que utilizan el transporte público consideran que han sido víctimas de violencia física o verbal o de algún tipo de acoso.

¿Y en España?  El acoso callejero ha sido denunciado, por ejemplo, por la Junta de Andalucía a través de una campaña con el eslogan «No seas animal», en la que buscan sensibilizar acerca de comportamientos machistas como silbidos, piropos o miradas a mujeres por la calle.