Pilar Abel no es hija biológica de Salvador Dalí

Europa Press

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La Fundación Gala- Salvador Dalí recuerda que puede emprender acciones legales para reclamar los costes de la exhumación

06 sep 2017 . Actualizado a las 18:55 h.

La vidente de Figueres (Gerona) Pilar Abel no es hija biológica del artista Salvador Dalí según han desvelado las pruebas de paternidad realizadas tras la exhumación de los restos mortales del genio ampurdanés. Lo han informado a Europa Press fuentes de la Fundación Gala-Salvador Dalí. El cuerpo de Salvador Dalí fue exhumado el 20 de julio a petición de la titular del Juzgado de Instancia 11 de Madrid que ordenó abrir la tumba con el fin de extraer material biológico y comprobar la supuesta paternidad que reivindicaba Pilar Abel.

Para desenterrar los restos mortales del artista, fue necesario retirar una losa de una tonelada y media de peso debajo de la cual descansa el cadáver embalsamado de Salvador Dalí desde hace 28 años en el Teatre-Museu de Figueres. Para cotejar las pruebas genéticas de Abel con los restos mortales de Dalí, se extrajeron pelo, uñas, dientes y dos huesos largos que en adelante serán repuestos en un acto privado para preservar la«integridad del cuerpo del difunto.

Envuelta de un gran eco mediático, la operación para exhumar los restos mortales fue considerada improcedente y un acto de violencia por los representantes de la Fundació Gala-Salvador Dalí, que lamentaron que la resolución judicial no estaba motivada por ningún tipo de fundamento.

Los resultados del test de paternidad se esperaban para los primeros días de septiembre, teniendo en cuenta que la celebración del juicio por esta causa está previsto para el 18 de septiembre. Los representantes de la fundación insistieron en que aceptaron la exhumación, tras agotar todos los mecanismos legales, mediante recursos y peticiones que tenía en su mano para evitar la acción, ordenada por la juez. Para evitar que se hiciera pública la imagen del artista embalsamado se llevó a cabo un amplio dispositivo de colocación de carpas gigantes sobre la tumba y la zona en que trabajaron los forenses para que hubiera la mínima gente posible en la zona.

Poca sorpresa en la Fundación Dalí

La Fundació Gala-Salvador Dalí ha recibido sin sorpresa que Pilar Abel no sea hija del artista y ha recordado su capacidad de emprender acciones legales para reclamar. Según ha explicado en un comunicado este miércoles, ha recibido el dictamen emitido por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en el que se recoge que los resultados obtenidos «permiten excluir a Salvador Dalí como padre biológico de María Pilar Abel Martínez». «Esta conclusión no es ninguna sorpresa para la fundación, ya que no ha habido en ningún momento indicio de veracidad de una pretendida paternidad», ha afirmado. Ha vuelto a lamentar que la decisión judicial ordenada por una juez de Madrid fue «inusual e injustificada», así como inadecuada y desproporcionada, por lo que ha recordado la posibilidad de demandar los costes relacionados con la operación. Ha celebrado que con estos resultados se ponga fin a una polémica «absurda y artificial», y poder continuar su trabajo vinculado a la gestión del legado artístico del artista.

Una reacción parecida ha tenido el embalsamador del cuerpo del artista Salvador Dalí, el forense Narcís Bardalet, ha recibido «sin sorpresa» que las pruebas genéticas hayan descartado que Pilar Abel es hija de Dalí. «Yo ya lo venía diciendo, pero no haré declaraciones hasta pasado el juicio -previsto para el 18 de septiembre- porque cuento con informaciones médicas» de tipo confidencial, ha declarado. El día después de la exhumación del cuerpo del artista el pasado 20 de julio, Bardalet se mostró conmocionado con el desentierro de los restos mortales de Dalí, 28 años después de ser embalsamado y enterrado hace 28 años en el Teatre-Museu de Figueres.

«Sentí una emoción histórica», explicaba entonces en declaraciones a Europa Press, en que explicaba su impacto de visualizar la buena conservación del bigote marcando las 10 y 10 horas -como solía decir el artista- y la melena de Dalí, siendo los elementos anatómicos más característicos del pintor surrealista. Reveló la dificultad de extraer muestras biológicas de Dalí por encontrarse con un cadáver duro, fruto del tratamiento al que fue sometido cuando murió en enero de 1989.

El equipo forense le inyectó litros de formol, lo que modifica el ADN del artista, del que se sacó un poco de pelo, uñas, dientes y dos huesos de las extremidades inferiores para cotejar con las pruebas genéticas de Abel.