Críticas en Norteamérica a las cicateras aportaciones de algunos famosos
04 sep 2017 . Actualizado a las 10:14 h.Muerte y destrucción. Ese es el resultado de los 102.000 millones de litros de agua caídos sobre Texas y Luisiana, desde que hace diez días Harvey cambió el destino de miles de ciudadanos. Para hacerse una idea de dicha cantidad, decenas de meteorólogos han recurrido a la comparativa para desvelar, por ejemplo, que con tales medidas se podría abastecer de agua a la ciudad de Nueva York durante más de 50 años o que con solo la mitad se podría acabar con la sequía de California en tan solo tres días.
La mayoría de los damnificados se concentran en Houston, una ciudad irreconocible que, tras ser la cuarta más poblada de Estados Unidos, es además ejemplo de que la madre naturaleza no hace distinciones.
A partir de mañana, los líderes políticos comenzarán largas jornadas de negociaciones para aprobar fondos de miles de millones de dólares que ayuden a la reconstrucción de la urbe, pero hasta que eso suceda Hollywood ha decidido enarbolar la bandera de la unidad.
Iniciativa de Kevin Hart
El movimiento fue creado por el actor Kevin Hart, quien bajo el lema Hurricane Harvey Relief Challenge y una primera donación de 25.000 dólares, comenzó una cadena de aportaciones en la que ya han participado decenas de famosos. Sin embargo, y como suele ocurrir cuando hay redes sociales de por medio, la iniciativa se convirtió en un arma de doble filo y lo que en un principio fue una plataforma de solidaridad, después se convirtió en un escaparate de cicatería.
Ocurrió con la pareja formada por Jennifer López y Álex Rodríguez, que tomaron al pie de la letra la invitación de Hart y cada uno donó los protocolarios 25.000 dólares. «Vamos, Jennifer... Que tú tienes bolsos más caros», le reprochó una de sus seguidoras, sabedora de que López fue una de las artistas mejor pagadas el año pasado, con 39,5 millones de dólares, según la revista Forbes. De igual manera, la regañina se extendió al actor Dwayne Johnson, conocido como La Roca, quien tras hacer la misma donación que su colega fue tachado de tacaño tras haberse embolsado 64,5 millones de dólares, también durante el último año.
En un intento de calmar los ánimos, la cantante Demi Lovato, la presentadora de televisión Ellen De Generes, el rapero Chris Brown o la familia Kardashian aumentaron sus aportaciones hasta llegar a los 500.000 dólares. Sandra Bullock elevó los niveles de solidaridad donando un millón para la Cruz Roja Americana, organismo que gestiona la ayuda a las víctimas del huracán devenido en tormenta: «Tenemos que cuidarnos los unos a los otros», pidió Bullock.
El millonario donativo fue repetido por el también actor Leonardo DiCaprio y Leslie Alexander, dueño de los Rockets de Houston, de la NBA, lo multiplicó por diez. Ambos son asiduos en este tipo de actuaciones, de hecho DiCaprio es un reconocido activista que ya ha prestado su ayuda en catástrofes como el tsumani del océano Índico del 2004, o el huracán Katrina en el 2005.
Fue este último precisamente uno de los desastres que registró más donativos en la historia del país, tanto a nivel nacional como internacional, con más de 150 países que ofrecieron suministros y efectivo a EE.UU. Con Harvey, sin embargo, la ayuda desde el exterior se ha limitado a los mapas de satélite cedidos por la Unión Europea, los productos de primera necesidad de Canadá y una inesperada oferta de México y Venezuela. Ambos países han dejado a un lado sus trifulcas diplomáticas con la Administración Trump y se han convertido en donantes de ayuda humanitaria y combustible para los cientos de miles de personas que necesitan de todo para volver a empezar.