Eduardo Sánchez Vila: «Hay empresas en las que la selección de personal la realiza un algoritmo»

Raúl Romar García
r. romar REDACCIÓN / LA VOZ

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El investigador de la USC alerta de que la mayoría de la gente no es consciente de los datos que cede a través de aplicaciones

06 abr 2017 . Actualizado a las 07:37 h.

¿Cuando te descargas una aplicación, te has parado a leer los permisos que le estás dando? La conversación se inicia con una pregunta del entrevistado al entrevistador a la que él mismo responde: «La mayoría de la gente no se preocupa de sus datos, y estás dando acceso a tus fotos, a tu micrófono, a tus contactos, a la clave de tu wi-fi... Y después se sorprende de por qué ocurren estas cosas». A Eduardo Sánchez Vila, científico en el grupo de Sistemas Artificiales en el Centro Singular de Investigación en Tecnoloxías da Información (CITIUS) de la Universidade de Santiago, le llama la atención, «como persona y como investigador, que la gente no se preocupe de sus datos». Es una preocupación que compartirá en la charla que ofrece hoy (19.30 horas) en el Muncyt de A Coruña organizada por la Fundación CorBI.

-Cuando dice que luego la gente se lamenta, ¿a qué se refiere?

-A que se sorprende cuando va a pedir un préstamo y no se lo dan, o cuando le suben el seguro y no sabe por qué, o cuando se presenta a un trabajo y no lo escogen. Y les pasa porque tienen un perfil de ellos.

-¿Pero las empresas o los bancos pueden acceder a esos datos si son privados?

-La respuesta es que sí pueden hacerlo, y pueden porque tú se los has cedido, aunque no seas consciente de ello. Hay muchas empresas que no son conocidas por el público que crean perfiles sobre nosotros con nuestros datos, y lo hacen en tiempo real. Y también en tiempo real se subastan estos datos a los anunciantes para que te puedan impactar con sus productos mientras tú estás viendo algo.

-Que los puedan utilizar para ofrecer publicidad personalizada no supone un gran problema. ¿Cuál es el peligro real?

-Solo un ejemplo, Facebook hizo un experimento para ver qué capacidad tenía de utilizar esos perfiles para cambiar nuestro estado de ánimo, el de la gente. A unos les filtró en su muro los mensajes positivos, y a otros los negativos. Y al cabo de un tiempo a los que se le filtraron los mensajes positivos bajaron su nivel emocional y emitían ellos mismos mensajes negativos.

-Estados Unidos aprobó que las empresas puedan negociar con los datos de los usuarios. ¿Qué le parece?

-No me sorprende, porque la protección de datos en Estados Unidos ya estaba muy descuidada y las empresas no tienen mayor problema para acceder a la información de los usuarios.

-¿Son un nuevo tesoro?

-Hay un dato de Amazon que me sorprendió. El 75 % de sus ingresos no proceden de la venta de sus productos, sino de la gestión que hacen de los datos de sus usuarios. Es espectacular.

-¿Por qué son gratis aplicaciones como Whatsapp, Gmail, Facebook o Twitter?

-Porque lo que quieren es tener un volumen tremendo de usuarios para dominar su sector y, una vez que lo consiguen, gestionar los datos de sus usuarios.

-Toda esta información necesita ser manejada e interpretada con las técnicas de «Big data». ¿Esta área será la gran generadora de empleo, tal y como dicen?

-Sin ninguna duda. La cuestión no son los datos, sino lo que puedes hacer con ellos. Te pueden servir, por ejemplo, para optimizar el gasto de energía en una ciudad, para predecir cuántas horas tienes que trabajar para ser eficiente en tu empresa o incluso puedes desarrollar proyectos de carácter sociológico que te permitan establecer modelos matemáticos para predecir y optimizar el funcionamiento de una sociedad.

-¿Qué otros ejemplos más cercanos del «Big data» existen?

-El Big data se está utilizando en máquinas inteligentes con algoritmos que se utilizan para realizar una primera selección de personal en empresas. La selección del candidato no la hace una persona, sino un algoritmo que te indica cuáles son las probabilidades de que el aspirante tenga éxito en la empresa. Y en algunas universidades americanas la selección de los estudiantes también las hace un un algoritmo.