El restaurante asturiano que arrasa en Sevilla: «Aquí gusta mucho la sidra, casi no vendemos refrescos»

En pleno corazón de Bormujos, un pequeño pueblo sevillano a las puertas de la capital andaluza, se esconde un rincón asturiano que ha logrado conquistar los paladares locales con los sabores tradicionales y los productos típicos del Principado. Este restaurante, con una carta que mezcla recetas asturianas de toda la vida con un toque de innovación, ha sabido transportar la esencia de la región a cientos de kilómetros de distancia.

Flor Arias es la propietaria y chef de Ensupunto, donde trabaja mano a mano con su hija María en las tareas diarias del negocio. Arias, nacida en la parroquia de Aces, en el concejo de Candamo, se trasladó a la capital andaluza en la década de los 60. Su padre, Ángel Arias, fue socio fundador del Centro Asturiano en Sevilla, el punto de encuentro por excelencia de los asturianos en la ciudad.

Flor Arias es heredera de una larga tradición familiar hostelera. En los años 80 y 90, su familia regentó dos negocios en la zona: La Traíña, en el icónico barrio de Triana, y Saira, en el pueblo de Tomares. Allí introdujeron la cocina asturiana en los paladares sevillanos, buscando preservar la esencia de los guisos y los platos que la madre y las tías de Flor Arias elaboraban en Asturias.

Ensupunto es ahora uno de los lugares de referencia en la ciudad hispalense. En su carta se pueden encontrar recetas propias de cualquier restaurante asturiano, como fabada, verdinas con pulpo, chorizo de Tineo ahumado a la sidra o los populares cachopos. Todo ello complementado con otros platos más locales, como la ensaladilla de gambas y la presa ibérica. 

Además, los productos que ofrecen en el restaurante son «100% asturianos», importados y distribuidos directamente desde el Principado. Su buen hacer entre fogones ha sido reconocido por la guía culinaria de Repsol, quien les ha otorgado un 'solete'. Es decir, una distinción por la calidad de su propuesta y por su ambiente informal y acogedor. Madre e hija reconocen que «se ha notado» el efecto llamada del galardón, que ha hecho que «cada vez venga más gente a probar nuestros platos».

Entre las elaboraciones más vendidas de su carta se encuentran los platos de cuchara y los cachopos, que «llevan años vendiéndose mucho, son todo un éxito». Tanto es así, que el local cuenta con uno de los cachopos finalistas en el campeonato nacional. Se trata del cachopo 'Toscana', relleno de queso suave, tomate seco, bacon frito y cubierto de queso parmesano, algo más alejado de la tradición asturiana.

Otra de las triunfadoras en territorio andaluz es la sidra. Una bebida refrescante de lo más cotizada cuando el sol aprieta: «Aquí gusta mucho, casi no vendemos refrescos. Todo el mundo pide sidra para beber», relata María.

Ensupunto se ha convertido en toda una embajada culinaria del norte donde nadie se queda sin sentirse, al menos durante un rato, como en Asturias. Aunque sea a cientos de kilómetros de distancia.