El madrileño que llegó a Asturias para montar una librería en un pueblo de 90 habitantes

Asturias

María S. Condado

Librería Pimiango

La gastronomía y la cultura nunca habían estado tan unidas. La Librería Pimiango, un proyecto emprendido por Esteban Raposo, reúne desde hace casi dos años en un mismo espacio estos dos placeres. Un local que se ha convertido en un referente para todo el oriente asturiano en el que se albergan numerosos eventos culturales.

Esteban Raposo, de origen madrileño, dejó en 2018 su trabajo como controlador de calidad de farmacéuticas en la capital española para emprender su nuevo negocio en Asturias, una librería en la «que la gastronomía y cultura, sobre todo los libros, están en relación en todo momento». La librería se construyó, literalmente hablando, desde los cimientos en Pimiango, concejo de Ribadedeva, donde Esteban y su familia contaban con un pajar «que estaba completamente en ruinas. Emprendí con la idea de sacarlo adelante y crear lo hoy en día es Librería Pimiango». La obra comenzó hace ya cinco años con la ayuda de dos albañiles del pueblo: «luego me quedé solo y saqué adelante el edificio», explica Raposo. Un proyecto que no hubiera sido posible de no ser «por mi familia y amigos que desde un primer momento se volcaron con esto. Pero, sobre todo, fue gracias a Celia, quien fue mi mujer y es mi compañera y mi apoyo económico, mi hija Laura, que sigue implicada y a hermana Carmen, filóloga y editora, quien, de alguna manera, dio forma a lo que esto es», agradece Esteban

Hace casi dos años, desde que la Librería Pimiango abrió sus puertas, un lugar donde se puede disfrutar de un buen vino mientras se compra un libro. La cultura es también un pilar fundamental en la Librería Pimiango, «todos los sábados, sin excepción, desde su apertura organizamos presentaciones de libros, conciertos, exposiciones…», explica.

Esteban Raposo trabaja en conjunto a Estelle Roullier, una filóloga y fotógrafa francesa con quien emprendió la labor de llevar a cabo este especio cultural. Otra de las incorporaciones al equipo fue Nacho de Carlos, «un hombre que hace un año apareció y aportó unas ideas que permitieron crear lo que esto es hoy en día» y también Prado, «que trabaja con nosotros en cocina».

Aunque esta librería no para de crecer, su próximo proyecto será El Cheru de Engalto, un nuevo proyecto que toma su nombre de la jerga gremial y que pretende ampliar los horizontes de la cultura del concejo y del oriente del Principado. Será en colaboración con Arsenio Manuel González, «es escritor y fue docente durante muchos años en Llanes. Cuando vio lo que se organizaba aquí y la cultura que se movía, no dudó en comprar el pajar de enfrente para hacer una extensión cultural de lo que hoy es esto». Al fin y al cabo, se trata de «un aliciente más para que la cultura del pueblo se mueva».

Gracias al esfuerzo y la dedicación, Esteban ha logrado transformar la Librería Pimiango en «un sitio en el que nunca habría pensado que se fuera a convertir: un lugar de encuentro cultural, muy humilde, muy familiar, donde la gente viene y disfruta de la cultura».