Elena y Luis están casados, pero han elegido vivir cada uno en su casa: «En diez años hemos discutido una sola vez. Esto no lo cambiamos por nada»
Las parejas que viven separadas son un modelo que crece en España. El «living apart together» es un «juntos pero no revueltos» que combina amor e independencia. ¿Funciona? Quien lo vive lo cuenta... Ellos firman una década de felicidad sin el desgaste de la convivencia