El director, Luis Trapiello, y varios de los actores presentan en el pozo San Luis el rodaje de esta película que narra la historia de supervivencia de cinco mineros tras un derrabe
16 may 2017 . Actualizado a las 22:54 h.Las cuencas han atrapado al equipo que está rodando la película «Enterrados» en todos los sentidos. Por un lado, porque la grabación se está haciendo desde hace dos semanas bajo tierra y, por otro, porque tanto el director como el elenco de actores aseguran estar disfrutando de la experiencia de rodar en las comarcas mineras pese a estar siendo «un trabajo de mucha entrega e intensidad», según manifestaban en la presentación del rodaje en el pozo San Luis, en La Nueva, pozo que se ha convertido en uno de los escenarios principales para grabar el que será el primer largometraje del escritor, guionista y director asturiano, Luis Trapiello.
El mismo, acompañado de los actores Joaquín Furriel, Paula Prendes, Manuel Pizarro y José Lobato, ha dejado entrever el argumento de esta película, con la que se narrará la historia de supervivencia de cinco mineros a 600 metros bajo tierra tras un derrabe. Sin embargo, esa peripecia por sobrevivir de un grupo de personas en situación límite y la relación que se establecerá entre ellos tendrá otra parte «onírica», en palabras de Trapiello, que será «lo que late dentro de los personajes». Así, el director ha explicado que «Enterrados» tendrá «dos planos de comprensión» que harán que sea dos películas en una, aunque no ha querido desvelar cual es «el plano profundo que revela la verdadera historia de esta película», plano que ha animado a descubrirlo ya en el cine cuando «Enterrados» entre en cartelera, lo cual espera que sea a finales de año. No obstante, lo que sí ha dejado claro es que este film es una forma «de asistir a los últimos momentos de la minería y contar una historia» que en no pocas ocasiones ha sido realidad en las minas asturianas.
Será entonces cuando se descubra qué ha pasado en el interior del pozo San Luis, donde el equipo de Luis Trapiello lleva dos semanas rodando y donde Joaquín Furriel, Manuel Pizarro, José Antonio Lobato, Candela Peña y Dimitri Garazha se transforman en Daniel, Soto, Jóse, María y Radeck y «sienten lo que sienten los mineros» cada día cuando entran a trabajar. Y es que según ha dicho el director, hay jornadas de rodaje que se prolongan durante once horas, aunque matiza que «los resultados están siendo buenísimos con Joaquín Furriel llevando el peso de la película». Al actor argentino ha agradecido el esfuerzo que está realizando por ponerse en la piel «de un técnico de oficina que se ve atrapado en una mina donde nunca había estado».
Por su parte, Furriel ha destacado la experiencia que está viviendo «en doble sentido: porque hago lo que me gusta y porque nunca había estado en Asturias», y aunque el protagonista de «Enterrados» ha confesado que está siendo «un trabajo de mucha entrega e intensidad» por todo lo que supone rodar en el interior de una mina, algo que entiende que «no se podría hacer en un set artificial», también ha reseñado que «me siento muy bien, agusto». A modo anecdótico ha comentado que a las once horas de rodaje tiene que añadir «una hora más en la ducha para sacarme todo el carbón», lo que ha dicho es «la última batalla del día».
¡Los asturianos son muy buena onda!
Por lo que ha contado en el encuentro con los medios de comunicación, a Joaquín Furriel le queda algo de tiempo entre rodaje y rodaje para conocer las cuencas. Así, hacía referencia a lo que había disfrutado con la experiencia de haberse sentado en un banco en La Felguera al lado de un grupo de gente mayor. «Era una maravilla todo lo que hablaban», ha dicho el actor, quien tras visitar estos días de atrás otros concejos como Cudillero y Llanes, además de los de las cuencas, ha manifestado que «¡los asturianos son muy buena onda!» con un cautivador acento argentino.
En la presentación del rodaje han estado también los asturianos Manuel Pizarro, Jóse Antonio Lobato y Paula Prendes, todos ellos conocedores de la realidad de Asturias y de la minería por haber tenido todos vinculación familiar con la mina. Cada uno de ellos ha dado unas pinceladas de sus personajes en «Enterrados», coincidiendo en poner de relieve el importante trabajo en equipo que se está realizando.