Los Jefes de Servicio de Urología y Oncología del HUCA destacan ante la Comisión de Investigación la calidad de los servicios, el amplio número de camas o la inexistencia de esperas de pacientes oncológicos
05 jul 2016 . Actualizado a las 17:42 h.El Jefe del Servicio de Urología HUCA, Ramón Abascal, ha comparecido este martes en la Comisión de Investigación sobre las listas de espera de la sanidad asturiana y, si bien inicialmente anunció su intención de no responder a las preguntas al considerar que no le toca a él «politizar» ni es en este ámbito donde a él le corresponde dar explicaciones, si ofreció algunas opiniones sobre el sistema durante casi dos horas. Entre otras cuestiones ha destacado que las derivaciones a centros privados o concertados siempre van a ser imprescindibles y ha destacado que «meter en el HUCA cirugías banales, como una vasectomía por ejemplo, es ridículo y carísimo». Abascal ha querido dejar claro que tenemos «una sanidad buenísima», algo que ha indicado «no lo puede dudar nadie», a pesar de los defectos que tiene. «Esta es la región de España con más camas por habitante, otra cosa es como se gestionen, pero esa cifra es así», ha dicho.
Sobre las listas de espera del Servicio de Urología, ha insistido que son muchos los factores a tener en cuenta para poder analizarla. «Encender el Hospital nuevo todos los días son dos millones de euros, así que hay que aprovecharlo al máximo, pero si lo aprovecho más del máximo me puede salir más caro todavía», ha indicado Abascal, que ha manifestado que «no respetar la distribución de las áreas sanitarias» es uno de los factores que influyen en las listas de espera. Ha dicho además que «nadie puede pensar que están de brazos cruzados» y ha relatado que son 16 personas, con tres quirófanos al día. Además ha recalcado que «no hay ningún tumor en lista de espera, ya que cuando se diagnostica en quince días está resuelto» y se tratan quince o 20 tumores a la semana.
Abascal ha indicado que él también ejerce en la medicina privada pero no son muchos los pacientes que recurren a ella a causa de las esperas en la pública. «El paciente que va a la privada no es porque marcha de la pública corriendo, es porque busca otras cosas, como un médico concreto o más intimidad», ha dicho el jefe de Urología del HUCA, que ha asegurado que con la crisis el gasto en medicina privada en Asturias ha bajado mucho. Ha negado que exista trasvase alguno de pacientes y ha indicado que «no conoce a casi ningún paciente que opera en la privada por haberle tratado en la pública». «Normalmente los pacientes que veo en mi casa no los veo en el hospital», ha insistido, y ha añadido que «prescindir de la medicina privada es imposible, se complemente con la pública».
La situación en Oncología
En cuanto al servicio de Oncología, la región cuenta actualmente con 21 oncólogos médicos -que se dedican específicamente a dar tratamiento contra el cáncer-, una cifra por debajo de las recomendaciones del Libro Blanco que, para la población asturiana, debería situarse en al menos 23 profesionales. Así lo ha explicado el Jefe de Servicio de Oncología Médica del HUCA, Emilio Esteban González, que no obstante ha querido dejar claro que no existe lista de espera para oncología. «Nos estamos enfrentando a un porcentaje superior a la media nacional; obviamente se debería hacer una evaluación de cómo están todos los estamentos y dónde hacer el esfuerzo para tratar de igualarnos a la media nacional en cuanto a prevalencia, porque jugamos con una plantilla justa y mermada», ha explicado Sevares.
Ha explicado que el HUCA cuenta con doce profesionales de esta especialidad y que se intenta llegar a trece, mientras que lo que correspondería por número de pacientes en dicho área sería «aspirar a quince y no a los trece a los que se aspira». A pesar de estas carencias, el Jefe de Oncología ha indicado que se siente «orgulloso» del servicio médico en el que no existe demora y la media es de cinco días. Así, en menos de una semana desde que llega a la consulta a oncología el paciente es visto. «Intentamos dar lo mejor de nosotros en una sanidad pública. No obstante hay que ser siempre humildes y hablar de posibilidades de mejora», ha manifestado el doctor, que ha destacado el papel importante que debe jugar la sanidad primaria para poder mejorar el diagnóstico precoz. De ahí que haya abogado por una mejor formación continuada.
En ese sentido, González ha explicado que el 90 o 95% de los pacientes que llegan a la unidad tumoral vienen ya con un diagnóstico hecho. También ha destacado los avances que han supuesto los cribados, como en el caso del cáncer de cólon o de cérvix. Ha negado que desde los servicios de Oncología Médica hayan tenido que cancelar alguna intervención por falta de anastesistas u otras carencias. Así mismo ha indicado que actualmente la sanidad pública dispone de todos los recursos terapeúticos de diagnóstico