Poco después del mediodía de ayer se incendió uno de los tres transformadores que miden la tensión de salida de una de las líneas de 400 Kv, que envían la electricidad producida por la planta a la red eléctrica nacional.
El Gobierno dará además cien millones en subveciones para compensar así el el efecto económico negativo que puede tener el cierre en 2013 de la central.