Los gijoneses cumplen el cuarto mes consecutivo sin sumar 3 puntos fuera de casa
20 feb 2018 . Actualizado a las 15:47 h.La pesadilla en los desplazamientos del Sporting parece no tener fin. El yin y el yang entre los partidos de El Molinón y fuera de casa sigue instaurado en el equipo asturiano y desde la visita al Reino de León donde se impusieron a la Cultural Leonesa (0-2) el 10 de octubre no se han vuelto a celebrar más victorias rojiblancas a domicilio. Unos números muy pobres y preocupantes para un equipo que teóricamente fue construido para ser un claro aspirante al ascenso. La parte positiva es que el idilio con El Molinón de momento se mantiene con 5 victorias consecutivas. La negativa, que el balance fuera de casa lo convierte en insuficiente para llegar siquiera a los puestos de play-off. ¿Cuáles son los motivos por los que el Sporting sigue sin estar acertado a domicilio?
Experimentos fallidos
Es innegable que tanto Paco Herrera como Baraja han intentado modificar determinados elementos del equipo que no han surtido el efecto esperado. Sin ir más lejos, el último partido que el ex técnico rojiblanco dirigió contra el Barcelona B llegó a probar a Álex Pérez de mediocentro y a Viguera en banda izquierda, encuentro que el Sporting perdió 2-1 y que le acabaría costando el cargo a Herrera.
El sábado en Lorca, Baraja optó por introducir un trivote en el centro del campo compuesto por Bergantiños-Sergio-Hernán y a Santos en banda derecha, aunque con la lesión de Nano el uruguayo actuó poco tiempo en esa posición. El resultado fue la suma de un punto contra el colista de la categoría que sabe a nada de cara al objetivo.
Planteamientos erróneos
Baraja llegó a Gijón pisando fuerte en feudo rojiblanco con pleno de victorias por el momento. Los planteamientos en el apartado táctico con el ya conocido sistema de dos delanteros parece ser el más efectivo en El Molinón donde el equipo ha competido de manera notable desde la llegada del “Pipo”. Por desgracia, no se puede decir lo mismo cuando el Sporting visita otros campos.
La primera salida con el nuevo entrenador se produjo a Granada, un campo complicado donde apostó por el mismo sistema y once titular que había vencido en su primer partido en casa al Tenerife (3-0). El Granada, que se llevó el partido (2-1), dominó a un Sporting desacertado en ideas y en ataque con la excepción de Santos que marcó el gol rojiblanco. Rubén Baraja volvería a patinar en los planteamientos a domicilio con el partido de Lugo (3-1), dando entrada sorpresivamente a Moi Gómez en ataque junto a Santos, dejando a jugadores como Rubén García y Jony en el banquillo o adelantando la posición de Isma López a interior izquierdo para situar a Canella en el lateral, posición en la que el navarro estaba cuajando buenas actuaciones.
La derrota en el Carlos Tartiere (2-1) contra el Real Oviedo acabó por agotar la paciencia de los seguidores sportinguistas. Baraja decidió mantener el sistema de juego y los jugadores que en El Molinón le dan resultado y jugadores como Bergantiños, Carmona y Carlos Castro fueron criticados por su actuación en el derbi asturiano. Los ovetenses aprovecharon la superioridad en el centro del campo para llevarse el partido y el “Pipo” volvió a pagar caro la falta de ideas para paliar los malos resultados fuera de casa.
Finalmente, el partido de Lorca (0-0) se presentaba como la oportunidad idónea para romper el maleficio lejos de El Molinón ante un equipo colista que llevaba 10 derrotas consecutivas. Sin embargo, cuando más se necesitaba ver a un equipo con mordiente y garra desde el primer minuto, Baraja optó por un cambio de sistema que para muchos debió llegar con anterioridad en otros partidos a domicilio. La incursión de Bergantiños por detrás de Sergio y Hernán Santana tampoco funcionó en el Artés Carrasco donde Rubén García volvió al banquillo a pesar de sus buenas actuaciones.
¿Soluciones?
Es evidente que al Sporting le falta fútbol y mordiente fuera de casa. No resulta probable ningún cambio significativo en la defensa, salvo por las opciones de que Isma López pueda entrar de nuevo en el lateral en detrimento de Canella. La pareja Bergantiños-Sergio Álvarez puede empezar a perder peso dentro del equipo y la opción de formar un doble pivote con el avilesino y Hernán Santana podría ser una primera solución inmediata de cara a próximos partidos. Tampoco hay que olvidar la posibilidad de Nacho Méndez, jugador reclamado por la afición en el primer equipo.
En los costados Jony y Carmona parten con ventaja, aunque las malas actuaciones del mallorquín los últimos partidos pueden darle una nueva oportunidad a Rubén García. Otra posibilidad sería incluir a Nacho Méndez en la banda de “falso interior” buscando combinar por dentro, opción que se antoja poco probable. Por último, en la delantera, Nano y Santos de momento ganan la partida a Viguera y Carlos Castro, teniendo en cuenta que el de Ujo lleva dos partidos seguidos sin entrar en la convocatoria.
