Piqué se aseguró una comisión de 24 millones tras un pacto con la Federación por la Supercopa de Arabia

La empresa de Gerard Piqué, Kosmos, y la Federación Española de Fútbol (RFEF) habrían acordado una comisión millonaria por llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí. Así lo ha hecho público El Confidencial, que expone cómo Luis Rubiales presionó a las autoridades de Riad para que abonaran al jugador hasta 24 millones por disputar el torneo en este país para, luego, intentar ocultar la participación del catalán.

Añade cómo la empresa que sirvió de intermediaria en el contrato se aseguró cuatro millones de euros anuales (por cada una de las seis ediciones de la competición). Desde el organismo que preside Luis Rubiales se había negado un pago directo a Kosmos. Según El Confidencial, el pago lo haría efectivo Arabia Saudí a la empresa, según estaba obligada por el contrato firmado con la RFEF.

El citado digital revela, además, un audio que le envió el presidente al futbolista catalán en cuanto el pacto con Arabia Saudí quedó cerrado: «Geri, enhorabuena. Y no me refiero ni al partidazo de ayer ni a tu gol. Me refiero a que ya son más de las 12 y por lo tanto ya es firme el acuerdo con Arabia Saudí. Un abrazo, gracias por todo y aquí estoy para lo que necesites. Bueno, menos para algunas cosillas que casi mejor no me necesites. Cuídate mucho, amigo». Un mensaje que data del 15 de septiembre del 2019.

Gerard Piqué habría tenido un papel protagonista en las negociaciones para la celebración de la Supercopa de Arabia Saudí. Desde el citado digital informan de cómo el catalán tuvo un trato privilegiado por parte de Rubiales a lo largo de este proceso. Algo que dan a entender las grabaciones difundidas este lunes y que la propia Federación no niega, aunque advierte que se trata de audios «robados y hackeados».

Las conversaciones sobre la Supercopa entre el presidente de la RFEF y el jugador del Barcelona comenzaron en el 2018. Año en el que el futbolista propuso cambiar el formato de la competición: convertir el torneo en una final four que disputarían tanto los dos primeros de la Liga como los dos finalistas de la Copa del Rey. Una propuesta que Rubiales no dudó en aceptar. A partir de ese momento, permitió a Piqué tantear el mercado en la búsqueda de potenciales compradores.

«Se le paga 8 al Madrid, 8 al Barça y a los otros 2 y 1»

Pero la participación del jugador del Barcelona no se queda ahí, siempre según El Confidencial. Un año más tarde, el presidente de la RFEF y el central mantuvieron conversaciones con el fin de planear la disputa de dicho torneo en el Camp Nou. Todo ello, después de que Rubiales le comunicara que iba a plantearle al Real Madrid la posibilidad de disputar la competición en el Santiago Bernabéu. Contando con que el club blanco no aceptase y así luego tuviese menos margen para protestar por la elección de la sede. 

«Geri, mira... Yo lo voy a ver también esto con el Madrid. Yo creo que el Madrid me va a decir que no. Como el Madrid me va a decir que no, eso nos viene de puta madre para justificarnos de cara al futuro y decimos que es el estadio con más capacidad [el Camp Nou], que es el campeón de Liga [el FC Barcelona], que es el campeón de Copa o finalista de Copa [el FC Barcelona]... Yo creo que legitimidad tenemos», expresó Rubiales, según recoge El Confidencial.

Un negocio que, para el conjunto culé, sería muy rentable: «A lo mejor, en vez de alquilar por medio kilo cada partido, lo puede alquilar por más y sacar dos kilos o dos kilos y medio».

El presidente de la Federación se reunió con el equipo de Chamartín, y también planteó llevar la Supercopa fuera de España (Piqué le había advertido de la posibilidad de celebrarla en Riad). Pero el Real Madrid no accedió a jugar fuera de España por menos de ocho millones. O al menos eso es lo que Rubiales le contó al futbolista, según esta publicación. «Si es un tema de dinero, si ellos [el Real Madrid] por 8 irían, hostia tío, se paga 8 al Madrid y 8 al Barça... a los otros se les paga 2 y 1... son 19, y os quedáis la Federación 6 kilos, tío. Antes de no quedaros nada, os quedáis 6 kilos. Y apretamos a Arabia Saudí y a lo mejor le sacamos... le decimos que si no el Madrid no va... y le sacamos un palo más o dos palos más...», contestó Gerard Piqué.

El Valencia fue uno de los equipos perjudicados por el reparto en el 2019. Un año después de la celebración de la Supercopa, el club aseguró haber recibido únicamente cerca de 800.000 euros de los 2,5 millones que le habrían correspondido. Además de criticar el cambio de modelo, el conjunto che demandó a la Federación por la distribución del dinero. El descubrimiento de estos documentos y audios avalan protestas valencianistas.

Con las negociaciones ya en marcha, Rubiales le envió un documento con las comisiones al catalán. El presidente se mostraba descontento, pues la cifras que aparecían no eran las que él esperaba. Y Piqué le consoló con una explicación: «Rubi, él [el representante de Arabia Saudí] se está refiriendo no a que la comisión la paguéis vosotros. Él se está refiriendo... es que al final hemos intentado quitar la comisión de los 25 millones. Así vosotros recibíais los 25 millones sin la comisión. Entonces, él lo que está diciendo es que no le apretemos tanto y que dentro de los 25 se incluya la comisión (…). No te preocupes por eso. Él simplemente está diciendo que contemples la posibilidad de, en vez de sacar la comisión de la ecuación, que contéis con que la comisión va dentro del precio. ¿Entiendes?», publica El Confidencial.

Si se deja de pagar la comisión a Piqué, la RFEF podría romper el acuerdo

El 11 de septiembre del 2019 se cerró el trato con Arabia Saudí. La Federación firmó un contrato para celebrar el torneo allí durante los próximos seis años. Un pacto que llevó al organismo a garantizarse 40 millones (libres de impuestos por ejercicio). Por su parte, la empresa de Piqué cobraría a la compañía pública saudí (Sela) cuatro millones de euros por cada una de las seis ediciones. Es decir, 24 millones en total.

Tras la oficialización, Rubiales ofreció una rueda de prensa para anunciar la sede de la Supercopa. Durante su intervención admitió que la empresa de Piqué, Kosmos, había formado parte de las negociaciones. Pero negó haber pagado al futbolista del Barcelona por un posible conflicto de intereses. 

Sin embargo, la RFEF había incluido dos cláusulas para obligar a Arabia Saudí a pagar, anualmente, a Kosmos los cuatro millones anteriormente citados. A pesar de que, supuestamente, no existía una relación entre el catalán y Rubiales, El Confidencial recoge un documento que explica que, «en el caso de que Sela deje de pagar la totalidad de la cantidad fijada como comisión de éxito a la tercera parte, la RFEF tendrá el derecho de dar por concluido este acuerdo sin castigo y manteniendo las cantidades ya cobradas».

Reclamación de los pagos y presión a los saudíes

Diciembre del 2019. Restaban escasos días para el inicio de la Supercopa y se esperaba que Rubiales acudiera a Arabia para participar en un acto de presentación. Pero recibió una queja de Piqué. El jugador del Barcelona reclamaba que todavía no le habían pagado. «Rubi, ahora que estamos despegando, esto es rápido. Han dicho que iban a pagar mañana. El problema es que han dicho que os van a pagar a vosotros. Y hostia... Creo que no tiene sentido que no nos paguen a nosotros. Entonces, el mensaje que hay que lanzar es: 'El presidente [Rubiales] va a ir si nos pagan a todos'. Porque si nos dejan de banda, la verdad es que no tenemos ninguna seguridad de que nos van a pagar a nosotros. Entonces, simplemente, querría que nos apoyaras en esto. Y que nos tienen que pagar a todos. Si no, no se va», recoge El Confidencial.

Dicho y hecho. Porque Rubiales consiguió que los saudíes pagaran lo acordado a Kosmos. El dinero llegó a las cuentas y, finalmente, el presidente de la RFEF viajó hasta Arabia.

Explicaciones tras la polémica

La Federación transmitió calma tras la publicación de los audios y documentos anteriormente citados. «La información no aporta nada nuevo a lo que se publicó en el 2019. Todos los números de la operación fueron presentados, explicados y respaldados por la Asamblea del fútbol», han comunicado al diario Marca desde el organismo.

La semana pasada la RFEF había denunciado ataques informáticos y robo de informaciones. Actos que podrían tener que ver con la información publicada. «Forma parte de la campaña de acoso y descrédito a la que ya estamos acostumbrados. Tenemos que estar muy tranquilos», han sentenciado.

Desde el organismo se ha defendido que la operación fue «limpia y clara», con la «cooperación» de la empresa Kosmos como intermediaria, y ha destacado que fue «muy positiva para el fútbol español» y que «ojalá» se puedan dar más acuerdos de este tipo.

«Es una operación limpia y clara, transparente», señalan fuentes de la RFEF consultadas por Europa Press. «Fue una gran operación para el fútbol español, muy positiva. Ha ofrecido 240 millones de euros en seis años, de los que 120 millones se destinarán directamente al fútbol no profesional. Ojalá se produzcan más operaciones así», apuntan.

Dimisión del Comité de Ética después de que Rubiales ocultara el pacto con el jugador

Tanto durante las negociaciones llevadas a cabo con Kosmos y el entorno empresarial de Gerard Piqué, Luis Rubiales ocultó a la Federación estas conversaciones y los posteriores acuerdos. Así lo desvela El Confidencial, que destaca que fueron varias las ocasiones en las que Ana Muñoz, vicepresidencia de Integridad requirió información al respecto. Semanas después, todo el equipo de integridad presentó su dimisión.

«La vicepresidenta de Integridad de la Federación, Ana Muñoz, pidió a Rubiales y su equipo que le aclararan los compromisos que había adquirido el organismo con la empresa del jugador del FC Barcelona, Kosmos Holdings, pero estos negaron que existiera ningún tipo de acuerdo. Rubiales también vetó un informe del Comité de Ética de la propia Federación, que se opuso a celebrar la Supercopa en Arabia Saudí por tratarse de una dictadura que pisotea los derechos de las mujeres, castiga la homosexualidad y aplica la pena de muerte. Tanto Muñoz como los tres integrantes del Comité de Ética de la RFEF presentaron su dimisión semanas después», recoge el diario digital.

Siendo todavía vicepresidenta de la federación, en noviembre del 2019, Ana Muñoz habría pedido a Andreu Camps, brazo derecho de Rubiales, acceso a toda la documentación, algo que, según insiste El Confidencial, no llegó a producirse.

«Camps invitó a Muñoz a ir a su despacho para leer allí mismo el contrato. Camps solo le mostró durante unos minutos la parte principal del contrato, pero no el anexo al acuerdo, un documento de solo una página de extensión en el que firmó Rubiales para exigir a las autoridades de Riad que pagaran a Piqué una comisión de éxito de cuatro millones».

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