Joan Barreda abandonó la carrera y todas sus opciones después de saltarse un repostaje y quedarse sin gasolina
14 ene 2021 . Actualizado a las 18:59 h.El francés Stéphane Peterhansel (Mini), en coches, y el argentino Kevin Benavides (Honda), en motos, afrontarán la última etapa del rali Dakar como máximos aspirantes al triunfo en sus respectiva categorías, después de la disputa este jueves de la penúltima jornada, una especial de 464 kilómetros entre Al-Ula y Yanbu. Sobre las cuatro ruedas, el triunfo de etapa fue para el catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota), su quinta victoria parcial en la presente edición, pero solo pudo recortarle menos de dos minutos al liderato de Peterhansel, mientras que Carlos Sainz (Mini) fue tercero a 2:26.
De este modo, 'Monsieur Dakar', que atesora en su palmáres un total de 13 títulos entre las categorías de coches y motos, está a punto de lograr el decimocuarto entorchado, 30 años después del primero que conquistó sobre dos ruedas. El piloto francés afrontará este viernes la última especial, un total de 225 kilómetros entre Yanbu y Jeddah, con más de 15 minutos de ventaja sobre Al-Attiyah, por lo que le bastará con no cometer errores para reinar en coches por octava vez. Por su parte, Sainz apunta al tercer puesto final a más de una hora de Peterhansel.
En cuanto a las motos, el británico Sam Sunderland (KTM) se llevó una etapa en la que Benavides reforzó su liderato y Joan Barreda (Honda) abandonó. El piloto español, que marchaba cuarto en la clasificación general a un cuarto de hora del liderato, se saltó un punto de repostaje en esta penúltima jornada y se quedó sin gasolina en el kilómetro 267. Así, pidió la asistencia del equipo médico y fue transportado en helicóptero al vivac, confirmando su abandono.
En cuanto a la pelea por el título, Benavides extendió su liderato gracias al mal día de Ricky Brabec (Honda), que perdió casi 13 minutos respecto al vencedor. De esta forma, el argentino arrancará la última etapa con 4:12 de ventaja sobre Sunderland y 7:13 respecto a Brabec, que necesitan un fallo del principal favorito para llevarse el trofeo.