Mark Fenwick, arquitecto responsable de tres de los ocho recintos, espera que pueda ser usado en «tres, cuatro o cinco Mundiales»
11 dic 2018 . Actualizado a las 18:01 h.El arquitecto Mark Fenwick, responsable del diseño de tres de los ocho estadios del Mundial de Catar 2022, aseguró durante una conferencia en la Agencia EFE que espera que el estadio Ras Abu Aboud, que será el primer estadio desmontable en un Mundial de fútbol «pueda llegar a tres, cuatro o cinco Mundiales».
«El estadio desmontable me extraña mucho que no lo haya hecho alguien antes. En otros eventos como los Juegos de Londres 2012 se hicieron canchas desmontables, pero eran cosas provisionales. Nosotros queríamos algo más como el circo, algo que se desmontara y pudiera llegar a tres, cuatro o cinco Mundiales, para mí sería el éxito de este estadio», señaló Fenwick, responsable del diseño de este estadio como socio del estudio de arquitectura Fenwick Iribarren.
El arquitecto, responsable también de otros estadios como el de Cornellá-El Prat del Espanyol o del nuevo Mestalla, defendió que acoger una gran competición deportiva puede ser un impulso para la renovación de estadios en un país.
«Creo que es importante que haya grandes eventos, para un país un gran evento es un catalizador, porque si hay un evento todo el mundo te va a ver y quieres que tu casa esté bien, ese desarrollo es muy importante», señaló.
En cuanto a los estadios españoles, Fenwick recordó que en la Liga ya hay varios clubes que han construido nuevos estadios, como el Espanyol, el Athletic de Bilbao o el Atlético de Madrid, que el Valencia tiene en proceso la construcción del nuevo Mestalla (diseñado por su estudio) y que otros, como el Real Madrid o el Barcelona, están en el proceso de renovar los suyos.
«Estamos hablando, no de la mitad de la Liga, pero sí de bastantes clubes. Hoy tengo una persona de otro club español que también quiere hacer algo. Estamos viendo una oportunidad en España de otro club que quiere renovar», desveló Fenwick, que también aseguró que tiene una propuesta de otro club europeo.
Bajo su punto de vista, una remodelación o una construcción de un estadio es «bastante rentable» aunque sea un gasto importante, ya que los campos de fútbol tienen ya muchos aprovechamientos económicos más allá de la disputa de los partidos.
«Es bastante rentable, un estadio ya no es un sitio donde nada más vas a ver un partido y te vas. Puede ser un añadido económico para el club si lo hacen bien», apuntó.
Respecto a la renovación del Santiago Bernabéu planificada por el Real Madrid, Fenwick opinó que le gusta el proyecto presentado. «A mí me gusta la remodelación, me parece bien siempre y cuando sea responsable y respete el entorno», opinó.
Fenwick explicó durante una clase magistral junto al director de Deportes de EFE, Luis Villarejo, el proceso de concepción de los tres estadios que ha ideado la firma española para el Mundial 2022: el Qatar Foundation, el Al Thumama y el Ras Abu Aboud, con una capacidad de 40.000 espectadores cada uno.
Sobre el Al Thumama, con forma circular y un curioso trenzado exterior, explicó que recrea con cables de acero el gorro 'Al Gahfiyah', que utilizan los niños cataríes. «Representa que el futuro del país es su juventud», relató Fenwick, que explicó que las 40.000 butacas quedan en 25.000 tras el Mundial.
En cuanto al estadio Qatar Foundation, con una impresionante cobertura exterior, relató que forma parte de un complejo deportivo universitario que incluye piscinas, pistas de tenis y un polideportivo, y que al retirar las gradas superiores dejará paso a una residencia de estudiantes y aulas universitarias.
«Con este estadio inventamos el primer sistema de refrigeración en un estadio, que consiste en llenar de aire frío el fondo como si fuera una piscina que se llena de agua. Hicimos una prueba en la que con 50 grados en el exterior había 24 en el campo», comentó Fenwick sobre este sistema pensado para cuando el Mundial 2022 se iba a disputar en verano, decisión finalmente modificada.
En cuanto al Ras Abu Aboud, el estadio desmontable formado por una estructura metálica sobre la que se ubican contenedores de barco que incluyen las gradas y los servicios, el arquitecto destacó que siendo uno de los países más ricos del mundo ha resuelto una clave de estos eventos: el sostenimiento económico.
«El país más rico del mundo resuelve algo que deberían haber hecho otros, tener un estadio económicamente sostenible. Se puede llevar al siguiente Mundial, o con las piezas se pueden hacer hasta 15 edificios distintos: estadios de tenis, atletismo, zonas de oficinas, y donde esté el estadio luego quedará un parque», dijo.
Otro de los proyectos que desarrolla el estudio español Fenwick Iribarren para la monarquía catarí es un 'camellódromo', un circuito con varias distancias (4, 6, 8 y 10 kilómetros) para las carreras de camellos, que incluye una grada móvil que se desplaza conforme se mueven los animales.
«A través de un monorraíl hay 400 personas en la grada que ven la carrera a la velocidad por la que ocurre. Es el encuentro de un deporte tradicional con la tecnología», finalizó el arquitecto en esta clase magistral.
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