La «Mannschaft» cierra una semana mágica en la que también se proclamó campeona de Europa sub-21
03 jul 2017 . Actualizado a las 09:38 h.La selección de Alemania confirmó su dominio en el mundo del fútbol conquistando este domingo la Copa Confederaciones de Rusia 2017 tras vencer (0-1) a Chile en la final celebrada en el Estadio de San Petersburgo, donde bastó un gol de Stindl 'regalado' por el rival para coronar a la imberbe 'Mannschaft'.
La atrevida y cuestionada apuesta por los jóvenes talentos de Joachim Loew dio como fruto la primera Confederaciones de Alemania. La campeona del mundo triunfó ante una Chile que no pudo dar continuidad a su doblete los dos últimos años en la Copa América. Tras un gran inicio, los de Juan Antonio Pizzi encajaron el único tanto del partido en un error defensivo de Marcelo Díaz.
Alemania no logró mandar ante la intensidad chilena, pero supo guardar la renta ante un rival sin gol pese al zafarrancho de 'La Roja' en los últimos 20 minutos. La campeona en Brasil 2014 vuelve a dominar el escaparate mundial y lo hace demostrando un amplio fondo de armario. Nuevas generaciones que, como en la reciente conquista del Europeo Sub-21, toman el fútbol para Alemania.
La campeona de América fue dueño y señor de la final durante 20 minutos. La garra chilena impuso su ley de inicio y se comió a una Alemania espectadora, con un par de marchas menos que su rival. La presión de los de Pizzi generó llegadas con peligro sobre la meta de Ter Stegen. Sin acierto Aránguiz, Vidal o Alexis, en la más clara, Chile no logró materializar una pasmosa superioridad.
La campeona del mundo no había comparecido sobre el verde cuando se encontró el regalo de Marcelo Díaz. El centrocampista del Celta de Vigo giró sobre sí mismo como último defensor y perdió el balón ante la doble presión alemana, con Werner robando y Stindl definiendo a placer. Chile trató de olvidar la desgracia y volvió a triangular de memoria para llevar peligro a la meta rival.
Sin embargo, el encierro alemán era ya a placer. Los de Loew aceptaron el rol secundario y encontraron buenas salidas en velocidad para generar peligro antes del descanso. Goretzka asomó en varias ocasiones a las inmediaciones de Bravo, seguro bajo palos, junto con Draxler, teniendo entre ambos el segundo tras otro regalo de la defensa chilena, esta vez de Jara.
ALEMANIA AGUANTA EL EMPUJE CHILENO
Tras el descanso Alemania decidió dar un paso adelante y buscar ser protagonista. La joven selección de Loew desafió a la experimentada Chile, lo que convirtió la final en un toma y daca sin dueño claro. Pizzi, que 'sacrificó' a 'Chelo' Díaz, buscó ganar la guerra de guerrillas con una agresividad que terminó intimidando a Alemania, aunque pudo costar la roja a Jara.
El intento fallido de hacerse con el balón devolvió a Alemania a su posición replegada y jugó con fuego los últimos 20 minutos. Chile, dispuesta a encadenar su tercer título en tres años, no tiró la toalla, pero no encontró certero rematador en sus llegadas. Los de Pizzi tuvieron el empate por medio de Alexis, de Vidal, de Aránguiz, de Sagal, la más clara y en su primer golpeo del torneo.
La furia chilena, ante el reto de estrenar su palmarés mundial, no bastó, ni en la última ya en el 95' de falta directa que salvó Ter Stegen ante Alexis. Alemania impuso su ley y una supremacía que vuelve a hacer temible a la escuela «Mannschaft».