El Real Madrid cuenta con jugadores de enorme proyección sobre los que perpetuar su dominio
05 jun 2017 . Actualizado a las 16:24 h.Marco Asensio se subió el sábado en Cardiff a esa ola de artistas del reciclaje entretenida en otorgarle nueva vida a la basura. Rescató el cuarto gol de una final decidida y le dio sentido. En ocho minutos de acción fue capaz de crear un homenaje a la familia. Convirtió el último gol de la temporada blanca y corrió primero hacia la grada en busca de su hermano, y después por la banda en pos del más reciente de sus diversos padres deportivos. Abrazó a Zinedine Zidane, y en el gesto iba implícito el reconocimiento al buen gestor que encierra el técnico. El traje a medida del francés viste a un entrenador tan capaz de convencer a Cristiano para administrarse en dosis como de exprimir ese talento bisoño que se alista en el Madrid, curtiendo por tramos a la chavalada hasta perfeccionar la mezcla que garantiza soberanía merengue para rato. Un futuro de aspecto saludable al que ha contribuido tanto la mano del míster como la inversión en talento importado. Carvajal fue el único producto de la fábrica blanca con plaza en el once inicial frente a la Juve. Dos más (Nacho y Morata) esperaron turno en el banquillo, mientras un cuarto (Lucas Vázquez) siguió el duelo desde la grada. Al gallego lo acompañó James en las bancadas.
No tiene sitio el colombiano, que llegó por ochenta millones de euros y se ha convertido en lunar, con solo 25 años. La aglomeración en un puesto en el que encajan Isco y Asensio entre otros forzará su salida en verano, mermando el número de futbolistas que no pasan del cuarto de siglo en el plantel merengue. Seis participaron en la final de Cardiff (solo dos utilizó la Juve) y salvando la portería y la punta no hay línea blanca sin ocupante que garantice al menos tres temporadas en fase de crecimiento.
A la zaga, que ya cuenta con Carvajal, Danilo (25 años ambos), y Varane (24), llegará Theo Hernández (19). Nacho, internacional con España, tiene 27. Para la medular liderada por Kroos (27, también), sirven Casemiro (25) y Kovacic (23), pero también encajan Isco (25) y Asensio (21), acostumbrados a ocupar zonas más próximas al área contraria. Tierras propias de Lucas (25), Morata (24 y poco dispuesto a continuar con su rol de suplente) o Bale (27). La figura del galés, fichaje de referencia en la época más reciente, atestigua el paso al frente de esa segunda unidad destinada a convertirse enseguida en primera. Su fragilidad le ha desplazado al puesto 16 en la lista de futbolistas con más minutos del curso. Todos los citados hasta esta línea (James incluido) superaron los 1.800 (el equivalente a 20 partidos completos) en un conjunto que ha ganado los títulos más importantes a nivel continental y doméstico. Nacho, Varane, Carvajal y Casemiro escoltan a Kroos (nadie ha jugado tanto como el alemán) entre los once más empleados. Isco hace el número doce.
El andaluz ha colado su nombre en la nómina de privilegiados que han hecho doblete de Champions sobre el campo y actuó también en la final de Lisboa. Sin embargo, ha alterado su rol: suplente en las dos contra el Atlético y brillante titular frente a la Juve.
Cedidos que prometen
Se atisba un debate acerca de la complementariedad de Isco y Asensio, abocados a un pulso que refleja la fenomenal salud del Real Madrid. Vigor que confirman varios entre quienes se perdieron a préstamo la campaña del doblete. Si se va Pepe, por ejemplo, en el plantel blanco podrá encontrar sitio Jesús Vallejo, de 20 años y titular con frecuencia en el Eintracht. Incluso Diego Llorente, de 23, pese a su discreto papel en el Málaga hasta la llegada de Michel. Todo lo contrario que otro Llorente, Marcos, futbolista revelación del curso sosteniendo al sorprendente Alavés, a los 22. Al futuro le falta un hombre gol, pero aún no asoma quien jubile a Cristiano.