Un físico potente y una confianza sin precedentes definen a Simone Biles, que logró su primer oro
10 ago 2016 . Actualizado a las 12:32 h.Simone Biles roza la perfección. La gimnasta a la que muchos sitúan como la heredera de Nadia Comaneci se plantó en Río con tres títulos mundiales consecutivos en el concurso general, y ayer, con 19 años, estrenó su palmarés olímpico con el oro en la final por equipos. Por delante le quedan suelo, barra, salto y el concurso general. Y pocos dudan de que esas finales también pueden ser suyas. La jueza internacional de gimnasia artística Zeltia García y el entrenador nacional Alfonso García analizan para La Voz a la reina del Arena Olímpica.
La diferencia
Hacer fácil lo difícil. ¿Qué tiene Simone Biles que la hace especial? En palabras de Alfonso García, que es capaz de «hacer que lo que es muy difícil parezca muy fácil. Biles lleva esa premisa de la gimnasia a su máximo exponente». Pero además, transmite una sensación de tranquilidad fuera de lo normal, como destaca Zeltia García. «Lo que más me llama la atención, pero ya no solo de Simone Biles, sino de todo el equipo americano, es la capacidad que tienen de transmitir confianza. Hay muchas gimnastas que son muy buenas, que tienen mucha dificultad técnica y son muy buenas en la ejecución, pero que te trasladan la sensación de que pueden fallar. En cambio, ellas no».
Su físico
Potencia a raudales. Biles es una gigante en un cuerpo de 145 centímetros, un físico que se ha convertido en su mejor aliado para hacer magia en su disciplina. «Tiene un físico espectacular a nivel de fuerza, agilidad, velocidad y flexibilidad. Es muy explosiva. La fama de que vuelven las gimnastas pequeñas a las que no dejan desarrollarse no es así, es solo que si son más pequeñas tienen un centro de gravedad más bajo, tienen más equilibrio, las fibras son más rápidas y todo eso favorece las cualidades de la gimnasta», argumenta Alfonso.
Ambición
Siempre al límite. La líder del equipo estadounidense de gimnasia escapa del conservadurismo. Le gusta arriesgar. «En gimnasia tienes unos elementos obligatorios mínimos, pero no tienes máximos. Te pueden pedir un doble mortal, pero tú puedes hacer un doble mortal agrupado o con dos giros. Entonces, es mucha más dificultad. Luego hay unos valores llamados valores de enlace que son que si tú encadenas varios elementos de mucha dificultad, te dan además un bonus, unas décimas más. Biles, además de hacer elementos muy complicados, une elementos de alta dificultad y ya los hace todos seguidos», desgrana Alfonso García. Se arriesga al límite, y normalmente lo hace perfecto.
Su carácter
Humildad y disfrute. 30 horas semanales es el tiempo que Simone, de 19 años, dedica a su deporte. Una entrega que solo alguien que lo disfrute puede poner sobre la mesa sin amargarse, aseguran los especialistas. «Se ve que es una persona bastante optimista y humilde, que es un factor importante a la hora de competir; te hace estar confiada, tranquila y pensar que no vas a fallar. Ella refleja una seguridad en sus ejercicios brutal», apunta Zeltia García. Y con ella concuerda Alfonso, que subraya que además de su sonrisa perenne, se percibe que «no es una gimnasta que tenga miedo, si tienes miedo, es muy complicado».
La especialidad
La reina del salto. Biles es la auténtica reina del salto, como recuerda Zeltia. «El otro día le quitaron 0,3 en cada salto, y eso es algo estratosférico. Luego, su suelo es impresionante, y es todo show verla». Sin embargo, las asimétricas son su talón de Aquiles. «Es un aparato muy técnico y ella tiene más fisonomía de suelo porque tiene unas piernas más fuertes, tiene más fortalecido el tren inferior y se inclina más a suelo y salto», desgrana la jueza internacional. En todo caso, tanto Zeltia como Alfonso coinciden en que, con Biles se está escribiendo una nueva era en la gimnasia artística.