«Handia», «Verano 1993» y «La librería», favoritos en unos premios que se prevén reivindicativos
03 feb 2018 . Actualizado a las 09:21 h.El cine español celebra hoy su gran fiesta anual, unos premios Goya (que se podrán ver en La 1 de Televisión Española a partir de las 22.05 horas) que sirven a la vez de escaparate y de reivindicación de las películas patrias. Esta vez, el contenido reivindicativo tomará también otro cariz, que es el de avanzar hacia la igualdad y el reconocimiento del cine hecho por mujeres. Si en la pasada edición de los Globos de Oro la pasarela previa a la ceremonia se tiñó de negro, en protesta por la desigualdad y el acoso, en la gala de esta noche se repartirán 1.800 abanicos rojos, encargados de visualizar y actuar de llamada de atención del desequilibrio entre hombres y mujeres en el sector del séptimo arte, una situación que la responsable de la iniciativa, Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales, califica de «alarmante y bochornosa».
Los números respaldan esta denuncia. En esta edición de los Goya las candidaturas de mujeres representan el 27 % del total, mientras que en ocho categorías su presencia es nula. Con todo, en los apartados estelares existe una mayor representación femenina: es un factor clave en tres películas de las cinco que optan a mejor filme. Verano 1993 y La librería, por ejemplo, tienen directora -Carla Simón e Isabel Coixet, respectivamente-, además de personaje protagonista, al igual de Verónica, de Paco Plaza. Una proporción que se reduce en la categoría de dirección, donde solo compite Coixet, que se las verá con Manuel Martín Cuenca (El autor), Paco Plaza y Aitor Arregi y Jon Garaño (Handia). Carla Simón se ha quedado fuera, aunque en su caso, porque opta a la mejor dirección novel.
Vocación artística
Por lo que sí ha apostado claramente la Academia del Cine Español es por producciones de autor. La librería, El autor, Verano 1993 y, sobre todo, Handia, se enmarcan en ese cine con vocación artística pero aspiración de público mayoritario, aunque la realidad tercia para que se quede en minoritario. Es elocuente el caso de Verano 1993, que pese a ser preseleccionada para representar a España en los Óscar, es ahora, con sus ocho nominaciones a los Goya, cuando ha podido volver a los cines. Un filme como Handia apenas ha podido ser visto en pantalla grande, sobre todo fuera de las grandes ciudades, y eso que en esta edición es la que más nominaciones ha cosechado.
Más amplitud tienen, curiosamente, las circunstancias lingüísticas de las películas favoritas. Dos, El autor y Verónica, se han rodado en castellano, pero la diversidad es patente en las demás: Verano 1993, en catalán; Handia, en euskera; y La librería, en inglés (y adaptación de una novela de una escritora británica, Penelope Fitzgerald).
Javier Gutiérrez, favorito
Quien podría ganar un nuevo Goya esta noche es Javier Gutiérrez. El ferrolano ya sabe lo que es vencer en la categoría de mejor actor -lo hizo en el 2014 por su trabajo en La isla mínima- y su papel protagonista en El autor podría resarcirlo de no habérselo llevado en el 2016 cuando optaba en el apartado de secundario por El olivo. Además del elogio unánime de la crítica, tiene las apuestas a su favor.
Los abanicos rojos esperan agitar un marco de desigualdad, pero también es clave la conciencia de que para conseguir el equilibrio en las categorías de los premios, que al fin y al cabo son el reflejo de una industria, es necesario cambiar estructuras para hacer posible la mayor presencia femenina. Es la tesis de Las Goya, un mediometraje que empezó como un trabajo de fin de grado de su director, Luis Miguel Juan Palao, y que ahora se exhibe en diversos festivales. «Es una industria machista, no hay nada más que ver los datos. Los hombres mandan en muchas ocasiones, y es un simple reflejo del machismo que hay en la sociedad, que impera en otras industrias, y en esta del cine pasa lo mismo», denuncia.