Los azules pierden un partido que sólo estuvieron en posición de ganar durante escasos diez minutos. Los errores propios con balón impidieron hacer más daño al Andorra
16 ago 2022 . Actualizado a las 09:36 h.El mejor
Marcelo Flores: 7. Ilusionó. El Tartiere se vino abajo cuando el mexicano saltó al campo. Bolo lo ubicó por detrás de Bastón, con libertad, para intentar ganar el centro del campo y, momentáneamente, lo hizo. Con la entrada de Enrich, Bolo le ubicó en la izquierda. Imprimió velocidad al juego. Se mostró hambriento y vertical. Suda talento y promete tardes de gloria.
El once
Tomeu Nadal: 6. Otro que se estrenó en liga con el equipo azul, ya había jugado el año pasado en Copa. Transmitió seguridad y solucionó con solvencia las llegadas del rival. No pudo hacer nada en el gol.
Lucas Ahijado: 6. Aunque fue el protagonista de las jugadas de ataque por su banda, estas fueron escasas. Cumplió en tareas defensivas, aunque falló un par de veces en salida de balón.
Rodri Tarín: 6. Al igual que el año pasado, cubrió la ausencia de Costas ? teórico titular ? sin problemas. Rápido al corte y sobrio con balón.
Dani Calvo: 5,5. Defensivamente, más que aceptable. Bien colocado, como acostumbra, no tuvo complicaciones y tampoco que estar demasiado pendiente de tapar a su lateral. Con balón no fue el que terminó la temporada. Ya vimos el año pasado que va de menos a más. Mejorará.
Alonso Aceves: 7. Buen debut del lateral zurdo mexicano. Seguro atrás, corrigiendo con velocidad las escasas veces que su par le ganó la partida, y dañino en ataque. Puso algún centro peligroso. Promete.
Viti: 5. Trabajador. Jugador de equipo que siempre llega al mínimo. En ataque, cayó demasiado al medio y poco al espacio, donde se le ven las virtudes.
Luismi: 4. Aunque empezó bien colocado y mezclando bien con Hugo Rama, fue a menos con el paso de los minutos. Se le echó en falta en salida de balón y estuvo muy impreciso con la pelota.
Hugo Rama: 6. Aunque fue el mejor de los cuatro centrocampistas, no brilló. Se fajó en defensa y trató de ser el cerebro del equipo, con escaso éxito. Se encargó de sacar el balón parado y estuvo cerca del gol en un disparo de la frontal que mandó Lizoain a córner. De más a menos.
Borja Sánchez: 5. Se ofreció, pero sin profundidad. No destacó en ataque ni se le vio cómodo en el campo. En defensa, ayudó a su compañero de banda.
Obeng: 6. Lo de siempre: trabajo y más trabajo. Ya es una tradición que sea titular en el Tartiere. El primero en ir a la presión y destinatario del juego ofensivo. Ganó un par de balones al espacio, pero, salvo en un remate de cabeza, no estuvo cerca del gol.
Borja Bastón: 6. Suyo fue el primer remate de la temporada, una volea que se marchó alta. Los pocos centros al área le buscaron, mayoritariamente, a él. Aportó al juego, pero tampoco tuvo ocasiones de gol. Importante cada vez que los suyos le encuentran.
Desde el banquillo
Sangalli: 3. Resucitó durante cinco minutos, pero no fue más que un espejismo. Desubicado y sin ritmo, no es ni la sombra del jugador clave que fue. Sin embargo, Bolo, al igual que Ziganda, confió en él. Algo tendrá el agua cuando la bendicen.
Sergi Enrich: 5. Se fajó en la presión y rozó el gol en remate de cabeza a centro de Bastón. Influyó positivamente en el juego y su expulsión, aunque en el 92, lo hizo negativamente. Ahí se acabó el partido para el Oviedo.
Montoro: 5. Saltó al campo dispuesto a llevar la manija. Se ofreció en salida de balón y tácticamente estuvo bien. Todavía le falta ritmo.
Jimmy: 5. Partido estándar del canterano y segundo capitán azul. Trabajó, pero apenas le vimos en ataque. Aun así, con él y Montoro mejoró el centro del campo.