Barbón y Rueda advierten de que el modelo actual, ya superado, debe cambiarse lo antes posible
29 nov 2022 . Actualizado a las 08:40 h.Galicia y Asturias defienden la necesidad imperiosa de abordar con urgencia el modelo de financiación autonómica: «Exige decisión política y altura de miras, pero resulta imprescindible para mantener la sociedad de bienestar. En ello coincidieron los dos presidentes, Alfonso Rueda y Adrián Barbón, conscientes de debilidades que comparten las dos comunidades, como el envejecimiento y la dispersión de la población o la orografía: «Pretendemos algo tan difícil como lógico: que haya un sistema justo de distribución de lo que al final es de todos. Y la obligación de quien lo distribuye es hacerlo con un criterio justo, que garantice, y esa es la clave, prestar los servicios públicos en igualdad de condiciones. Eso no pasa por recibir lo mismo», manifestó Rueda, quien urgió al Gobierno a coger el toro por los cuernos: «No es fácil de hacer, pero el modelo actual de distribución está superado y cuanto más se dilate abordarlo, peor». La solución, opinan, pasará obligatoriamente por un ejercicio de cesiones: «No se puede primar solo la población».
Barbón reivindicó la plena vigencia de la declaración institucional de Santiago de hace un año, en la que los presidentes del llamado grupo de los ocho (Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Galicia, La Rioja, Cantabria, Aragón y Asturias), defendieron un nuevo modelo de financiación autonómica que tuviera en cuenta el coste real de los servicios que prestan: «Es un debate de justicia, y como salga mal se pondrá en tela de juicio la supervivencia de España como Estado en el que se den los servicios con una misma calidad».
Sobre impuestos, Rueda defendió bajarlos y apostó por la viabilidad de la cuadratura del círculo: controlar la deuda y bajar impuestos compatibilizándolo con la sostenibilidad de los servicios públicos. Puso como ejemplo a Galicia, la segunda comunidad autonómica en régimen común que ha incrementado menos su deuda: «Y hemos hecho rebajas fiscales que desde el 2009 han ahorrado a los gallegos 1.200 millones de euros en impuestos».
La vía asturiana, expuso Barbón, pasa por no subir impuestos y aumentar los beneficios fiscales a determinados colectivos: «La gente entiende que pagar impuestos es el coste de la civilización». Y añadió: «La justicia fiscal es el camino de la justicia social».