El partido destaca que no consulta con la dirección el sentido de su voto
10 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.En el segundo debate para la extensión el Estado de Alarma celebrado en el Congreso, el diputado de Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca, respaldó la prolongación de las medidas reclamada por el Gobierno pero con un discurso duro en el que recalcó que el suyo en todo caso era uno «de reprobación al irresponsable empeño de quitar importancia al gran contagio que llegaba desde China y ya asolaba Italia, y de su incapacidad para organizar una logística acorde con la peligrosidad de la epidemia y dotarnos de los medios necesarios para enfrentarnos a su agresividad».
Oblanca se alineó con el Partido Popular en un discurso de aguda crítica a la labor del Ejecutivo socialista, singularmente al acusarlo de estar «ocultando los datos de hospitalizados, de ingresados en UCI’s y del número de pruebas que se hacen diariamente». Despachó así la posibilidad de unirse a la petición de Pedro Sánchez de alcanzar unos nuevos Pactos de la Moncloa para la reconstrucción económica. Sin embargo, no se trata de un posicionamiento compartido con la dirección de su partido, con la que no se reúne desde hace meses para consensuar los posicionamientos en el Congreso de los Diputados, ya que se encuentra enfrentado con la presidenta Carmen Moriyón en su dura pugna con el fundador del partido, Francisco Álvarez-Cascos.
Fuentes de la dirección de Foro en el Principado señalaron que «es nuestra obligación estar a la altura, aunque en muchos casos el Gobierno no lo esté, y apoyaremos todas las medidas que sean necesarias para frenar la expansión del virus, que debe ser nuestra prioridad».
Más duro en sus apreciaciones fue José Suárez, «Felechosa», miembro de la dirección de Foro, que en la jornada previa al debate en el congreso acusó a Oblanca de estar «hiperventilando en el Congreso» en vez de estar «apoyando como enfermero que es».
No se trata del primer choque entre Oblanca y la dirección del partido, a la que no considera legítima, a la hora de posicionarse en el Congreso. A mediados de febrero, la dirección asturiana mostró su malestar porque su diputado hubiera votado en contra de la Ley de Eutanasia «por su cuenta» y sin haber llegado a consultar con el partido.
Oblanca se encuentra alineado con el fundador de Foro, Francisco Álvarez-Cascos, que mantiene una guerra abierta con la dirección actual, presidida por Carmen Moriyón, y que mantiene al grupo dividido. Desde esa quiebra (que ha afectado también al grupo en el parlamento asturiano con cada uno de sus dos diputados partidario de una facción), Oblanca ha cortado la comunicación con la dirección en Asturias e incluso ha creado, con los fondos del grupo mixto al que pertenece, una página web para difundir sus iniciativas al margen de la oficial de Foro.