La epidemia pega un salto en el Principado a un día de cumplir la semana de confinamiento
20 mar 2020 . Actualizado a las 21:52 h.El viernes 13 de marzo, el Principado se adelantaba al Gobierno central y decidía dar un paso para frenar el coronavirus. Ordenaba el cierre del comercio y la hostelería, desde las 12 de la noche. 24 horas después el Gobierno central, decretaba el estado de alarma. Hoy, el COVID-19 se extiende por Asturias. En las últimas horas, los casos, los fallecimientos y los ingresos han dado un salto cualitativo. La Consejería de Salud acaba de informar que, a última hora del viernes, el número de casos acumulados roza ya los 500. En concreto, son 486. Los hospitales tienen 111 ingresados, de los que 12 están en UCI. Además, se han registrado cinco fallecimientos, los últimos cuatro en un lapso de apenas 24 horas. La quinta fallecida es una mujer de 81 años que padecía una patología previa.
A lo largo de la semana el ritmo del contagio había sido estable. En los dos últimos días se había registrado un repunte, con una media de 50 casos diarios. Pero la recta final de la semana ha marcado un cambio en la tendencia. La última cifra oficial aportada por el Ministerio de Sanidad elevaba los positivos a 344. Eran datos de las ocho de la tarde de ayer, jueves, que se ofrecieron, hoy viernes, a las 12 del mediodía. Apenas nueve horas después son 142 más. El número de ingresos hospitalarios, que también era moderado, ha dado un salto de las mismas proporciones. La letalidad, que se encontraba entre las más bajas del país, también ha avanzado.
Uno de los focos que más preocupa a la administración es el registrado en la residencia geriátrica del ERA en Grado. 57 residentes y 13 profesionales han dado positivo en este establecimiento, que se ha convertido en el segundo gran brote de coronavirus en Asturias, después que el colegio Masaveu marcara la llegada de la epidemia al Principado. La Administración, que esta misma mañana ya decidió medicalizar este centro para poder garantizar la atención, ha confirmado estos 70 casos. No son los únicos en la red de establecimientos públicos de la tercera edad. El de Palacio del Villar, en Piedras Blancas, que ayer tenía dos, ya suma seis. El resto permanece igual. El positivo de un trabajador del centro de El Cristo, en Oviedo, es el de un profesional sanitario itinerante, que también trabaja en Grado y que ya está incluido en esos 70. En la residencia Santa Teresa de Oviedo, hay un profesional afectado y también un residente, que ha recibido el alta por su evolución positiva pero que todavía no se encuentran entre los que han pasado los dos exámenes que confirman la curación. Además, se ha detectado otro más en un usuario de la residencia de Moreda. Solo en el ERA, el balance asciende a 80.
El Servicio de Salud del Principado (Sespa) ha estado estado preparándose para este momento. La gerente del Sespa, Concepción Saavedra, anunció el jueves una extensa reorganización temporal de la Atención Primaria para poder garantizar la asistencia sanitaria, los turnos de trabajo de los profesionales y para tener siempre el relevo garantizado. Se ha decidido cerrar 64 consultorios periféricos y concentrar la atención en 63 centros de salud y en otros 67 periféricos diferentes. Las urgencias se atenderán en 53 puntos de atención continuadas. Las áreas sanitarias con más cierre de instalaciones y más modificaciones son la VI, del oriente; la III, con cabecera en Avilés; y las I, del noroccidente. Saavedra ha señalado que este nuevo mapa temporal se ha diseñado teniendo en cuenta la población, la dispersión y también el envejecimiento.
Ya están preparadas las áreas de hospitalación en aislamiento, que se irán llenando de manera organizada. El HUCA atenderá, en principio, los ingresos de los afectados de las áreas I, II, IV y V. En el Hospital Universitario de San Agustín serán hospitalizados los de su área sanitaria y el Vital Álvarez Buylla de Mieres atenderá las hospitalizaciones de las Cuencas Mineras y del Oriente. Esta organización puede variar según vaya evolucionando la pandemia. De hecho, inicialmente se había apuntado la posibilidad de que fuera en cascada, es decir, que a medida que uno se fuera ocupando se pasara a otro. Hay 156 camas previstas en el HUCA, 31 en el San Agustín y 28 del Álvarez-Buylla, en Mieres. En el resto también se están buscando espacios adecuados. Con las camas de UCI, hay 60 organizadas en el HUCA, once en el San Agustín y ocho en el Álvarez-Buylla, que contará con el refuerzo de la UVI del Valle del Nalón.