Asturias cierra la ría de Ribadeo de forma cautelar para mariscar tras el vertido de purín
ASTURIAS
El siniestro no afectó a la traída de agua de cuatro concellos, pero se instalaron barreras anticontaminación en dos kilómetros del Eo
27 ago 2019 . Actualizado a las 09:51 h.La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) y el Seprona de la Guardia Civil, en colaboración con el Principado de Asturias y la Xunta, continúan tomando muestras, adoptando medidas e investigando las causas que provocaron que purines de una granja de Guiar-Vegadeo, en el Occidente asturiano, acabaran este fin de semana en el río Eo. Además de que Ayuntamientos fronterizos gallegos, como Ribadeo o Trabada, pidieron a vecinos y visitantes, como medida de precaución, que no se bañaran en playas o áreas recreativas del río y de la ría, desde la Dirección General de Pesca Marítima del Principado decretaron el lunes por la tarde el cierre cautelar de la ría para la extracción de moluscos. «La medida se ha adoptado mientras se realiza la toma de muestras y su análisis por parte del laboratorio de Salud Pública», explican desde el Principado, indicando que en la desembocadura se encuentra la zona de producción de bivalvos de la ría. Confían en levantar el cierre cautelar «a la mayor brevedad, en cuanto se emita un informe favorable».
Además, la confederación ordenó ayer la instalación de barreras anticontaminación en los dos kilómetros del Eo previos a su desembocadura, que son de competencia estatal.
A lo largo de la mañana de este lunes se han ido colocando carteles informativos que desaconsejan el baño en las playas de Galicia y Asturias afectadas por la contaminación del río Eo con entre 300.000 y 350.000 litros de purines vertidos a uno de sus afluentes, el Ouría, según datos de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, aunque inicialmente fuente de la Guardia Civil apuntaron a una cifra mayor, 580.000 litros. Proceden de una explotación ganadera situada en la parroquia de Guiar, en el municipio de Vegadeo, en el Occidente asturiano, donde distintas fuentes apuntan que este domingo se rompió un tanque donde los guardaban.
En el arroyo Ouría ya han aparecido crías de trucha muertas, posiblemente a consecuencia de este vertido, según apuntan las fuentes consultadas. Desde el Gobierno del Principado de Asturias anunciaron este lunes por la tarde el cierre cautelar de la ría para la extracción de moluscos. Fue la Dirección General de Pesca Marítima la que decretó el cierre para todas la especies explotables a raíz del vertido. Las mismas fuentes indican que trabajan para levantar el cierre cautelar "con la mayor brevedad posible, en cuanto se emita un informe favorable".
Al menos afectan a una zona de nueve kilómetros de la desembocadura del río; además de en el municipio vegadense, al también asturiano de Castropol así como a los gallegos de Ribadeo y Trabada.
Pasadas las dos de la tarde de este lunes, desde la Delegación del Gobierno en Asturias apuntaban que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y el Seprona de la Guardia Civil «están trabajando para esclarecer los hechos que causaron los vertidos». Actúan «en coordinación» con el Principado de Asturias, con el objetivo de «identificar a los posibles responsables del vertido, así como, especialmente, mitigar las consecuencias que pudiesen afectar al entorno».
Desde la mañana de este lunes, los municipios afectados han colocado carteles prohibiendo el baño en las playas de la orillas gallega y asturiana de la desembocadura del Eo, en Ribadeo y Castropol, así como en la ría de Abres, en el ayuntamiento de Trabada. Paralelamente, autoridades sanitarias y de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico trabajan en el cauce del Ouría, en el entorno de la zona del vertido. Pasada la una de la tarde de este lunes, desde el Concejo de Vegadeo añadían que equipos interdisciplinares valoraban los daños.
Aparte de las evidentes consecuencias sobre el medio ambiente, y su repercusión en el uso de las zonas de baño, también había inquietud por el suministro de agua. Desde el Concello de Ribadeo, el alcalde en funciones Pablo Vizoso transmite «tranquilidade á veciñanza xa que os parámetros da auga da traída non se viron alterados polo vertido, que se rexistrou augas abaixo da captación» de la traída municipal, situada en Vilarbetote (Trabada). Aun así, «como medida de precaución», Ribadeo pide a vecinos y visitantes que no se bañen en las playas de la ría, Os Bloques y O Cargadeiro, donde esta lunes por la mañana ha colocado carteles informativos advirtiendo de la situación.
A la ciudadanía y a los alcaldes de Trabada, Ribadeo y Castropol también se ha dirigido el regidor de Vegadeo, avisando de un vertido que según las informaciones que manejaba a última hora del domingo sería de entre 200.000 y 300.000 litros de purines y se debería a la rotura de un tanque de una ganadería de Guiar. El alcalde veigueño pedía precaución en el uso de las playas.
Desde la Confederación Hidrográfica del Cantábrico han confirmado que en las últimas horas se ha avanzado en la contención del vertido y que en la jornada de mañana podrían tener ya los primeros resultados de las muestras realizadas. También desde la empresa Viaqua, concesionaria del servicio de aguas en Ribadeo, han señalado que «la captación no se ha visto afectada ni comprometida en ningún momento» y que «los parámetros de los análisis periódicos no se han visto afectados».
Por el momento no hay confirmación de si llegó a la ría, un análisis que depende de la Consellería de Sanidade, por lo que desde el ayuntamiento han recomendado no bañarse en la misma, así como en las playas de Os Bloques y O Cargadoiro hasta que se conozcan más detalles. Por su parte, el ayuntamiento vecino de Trabada ha prohibido el baño en el río Eo y ha suspendido asimismo todo tipo de actividades de recreo. En ambos casos, tanto en Ribadeo como en Trabada, han instalado carteles informativos alertando de la situación.