El empresario asturiano fue descuartizado en el cuarto de baño con siete cuchillos
ASTURIAS
La desaparición de los filos de la cocina de la vivienda y los análisis del vídeo aportan indicios para esa hipótesis a la espera de los análisis científicos
29 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Nuevos datos sobre el asesinato en Argentina de Roberto Fernández Montes, el empresario de origen asturiano, salen a la luz y cada vez son más morbosos. Entre las últimas novedades que se han desvelado se encuentra la desaparición de siete cuchillos de la cocina del apartamento de la víctima, que residía en el barrio de Caballito, en Buenos Aires, donde ocurrió el homicidio. Este descubrimiento, dado a conocer por el abogado de las hijas de Fernández Montes, Matías Morla, se presta a la teoría de que el asesinado pudo ser descuartizado en el cuarto de baño de la vivienda haciendo uso de los siete cuchillos desaparecidos.
Existen otros detalles además de la desaparición de los cuchillos que llevan hasta esa teoría. La hipótesis se refuerza con los análisis de las grabaciones de las cámaras de seguridad del edificio, donde todo parece indicar que el cadáver del empresario, que fue extraído del edificio envuelto en una sábana ensangrentada, ya habría sido despedazado en varios trozos antes de abandonar el escenario del crimen. «Al cuerpo, según se ve en los vídeos y de acuerdo a cómo apareció, no lo sacaron entero del edificio», comunicaron fuentes del caso al diario Clarín. Además se pidieron análisis del cuarto de baño de la casa de la víctima para comprobar si efectivamente el descuartizamiento se realizó allí. Para ello utilizarán un compuesto llamado luminol, una sustancia que reacciona ante los restos de sangre recientes aunque hayan sido lavados.
No fue el único dato que aportó Morla en las declaraciones hechas en su participación en Radio Mitre. Además de aportar el dato de la ausencia de las siete hojas de acero de la cocina, el letrado especuló con la posibilidad de que hubiese un nuevo implicado en el caso, concordando con la línea de investigación que está siguiendo ahora mismo la policía argentina. Matías Morla se atrevió incluso a dar un nombre, y afirmó que el posible cuarto implicado sería un hombre que respondería al nombre de «Gabriel».
Dos detenidos y un prófugo
Por el momento el crimen de Caballito suma tres personas implicadas a las que se podría sumar el supuesto Gabriel. El más comprometido es su yerno, Santiago Corona, quien aparece en la grabación de las cámaras de video extrayendo el cadáver del edificio en compañía del carnicero paraguayo Pedro Ramón Fernández Torres, quien se encuentra todavía en paradero desconocido. Detenido aunque con menos pruebas completa la lista César Ricardo Arce, conocido como el mecánico, un exempleado de la empresa de Fernández Montes que mantenía una estrecha relación con el yerno de la víctima y que podría haber contratado al carnicero paraguayo como sicario. El mecánico no aparece en la grabación como en un primer momento se pensó, ya que contaba con la coartada de los tatuajes de sus brazos, los cuales el hombre del vídeo tiene completamente limpios.
«Si Giselle, la hija menor de la víctima, no se ponía a revisar las filmaciones del edificio, todavía estaríamos pensando que se trataba de una desaparición», destacó Morla en su intervención radiofónica. «Y si no hubieran estado funcionando las cámaras, que hasta hace unos días no andaban, nunca hubiéramos sabido lo que realmente ocurrió», agregó el abogado.