La OTAN alerta de que los objetivos del Kremlin no se detienen en Ucrania
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La Alianza comienza a desplegar parte de su Fuerza de Respuesta para garantizar la protección de cada uno de sus miembros
26 feb 2022 . Actualizado a las 09:32 h.«Los objetivos del Kremlin no se detienen en Ucrania», alertó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, al término de una cumbre de líderes aliados por videoconferencia, convocada de urgencia ante la «guerra sin sentido» emprendida por Rusia contra su vecino. La Alianza ha empezado a desplegar parte de su Fuerza de Respuesta para garantizar la protección de cada uno de sus miembros, informa Efe.
Los líderes aprobaron una declaración en la que piden a Rusia que «cese de inmediato su asalto militar» y «retire a todas sus fuerzas de Ucrania», y en la que hacen responsable a Moscú del conflicto y de la pérdida de vidas y sufrimiento humano que ha causado. «No debe haber lugar a malentendidos: vamos a proteger a cada aliado y cada centímetro del territorio de la OTAN», subrayó Stoltenberg en una rueda de prensa tras el encuentro virtual.
La cumbre siguió a la reunión del jueves de embajadores del Consejo del Atlántico Norte, en la que ocho países de Europa del Este invocaron el artículo 4 del tratado fundacional de la Alianza, que contempla consultas cuando alguno de los aliados siente que su integridad territorial está amenazada. Los aliados decidieron entonces activar los planes de defensa de la OTAN, lo que les permite poder desplegar capacidades, incluida la Fuerza de Respuesta, donde sea necesario.
«Tenemos que tomarnos esto en serio y eso es exactamente lo que estamos haciendo. Y ahora vamos a desplegar las fuerzas de respuesta de la OTAN por primera vez en defensa colectiva. Y hablamos de miles de militares, hablamos de capacidades aéreas y marítimas», explicó Stoltenberg, que añadió que se trata de tropas estadounidenses y europeas, sobre todo de Francia y Alemania.
Recordó que Estados Unidos, Canadá y los aliados europeos han desplegado miles de tropas más en la parte oriental de la Alianza, y que hay «más de 100 aviones en alerta máxima operando en más de 30 lugares diferentes y más de 120 buques desde el Alto Norte hasta el Mediterráneo», incluyendo tres grupos de portaviones de ataque.
Refuerzo en el Mediterráneo
Diversos congresistas republicanos de EE.UU. creen que la Marina estadounidense tiene que dominar el Mediterráneo con el portaviones USS Harry Trump y los cuatro destructores anclados en Rota para romper el bloqueo naval que en estos momentos impide a EE.UU. y a la OTAN reabastecer de munición al Ejército ucraniano. Los misiles Stinger y Javelin antitanques que proporcionaron han tenido buen uso, porque si de algo sirvió la estrategia de anticipar públicamente los pasos que iba a dar Putin fue para retrasar la invasión y armar a Ucrania, según informa la corresponsal de Colpisa.
Estados Unidos visualiza la posibilidad de que Ucrania sea un nuevo Afganistán para Rusia. El plan b de Washington sería alimentar una guerra de guerrillas que, a lo largo del tiempo, desgaste al Gobierno de Putin.
En Londres, más de un millar de personas pidieron ayer ante Downing Street, sede de la jefatura del Gobierno británico, que la OTAN actúe militarmente contra la invasión rusa de Ucrania y decrete una zona de exclusión aérea para impedir los bombardeos.
Durante la cumbre aliada, el primer ministro italiano, Mario Draghi, afirmó que el comportamiento de Rusia supone la mayor amenaza en años para la seguridad euroatlántica y los valores de democracia y libertad.
Para el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Seguridad, Josep Borrell, Europa debe «armarse moralmente», «protegerse económicamente» y «preparase para lo peor» tras la agresión rusa a Ucrania.
«Ante esta situación, la más peligrosa a la que nos hayamos enfrentado en Europa desde el fin de la Guerra Fría, tenemos que armarnos moralmente, protegernos económicamente y prepararnos para lo peor, elevando constantemente el nivel de nuestra capacidad de disuasión y nuestro poder de represalia política y militar», escribe en una tribuna que publica el vespertino Le Monde.