Washington podría intercambiar con Moscú al traficante de armas Víctor But y al comandante Yaroshenko por el estaounidense Paul Whelan, condenado a 16 años de cárcel por espionaje
25 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Rusia negocia la liberación de varios ciudadanos rusos encarcelados en Estados Unidos. Entre los presos figura el traficante de armas Víctor But, conocido como el «mercader de la muerte», según reconoció este miércoles la Defensora del Pueblo, Tatiana Moskalkova. «Este asunto es confidencial. Las negociaciones no han terminado», comentó Molskalkova a Interfax, según recoge Efe.
La esposa de But se mostró la pasada semana dispuesta a dirigirse a las autoridades estadounidenses —al presidente, Donald Trump, y al Congreso— para organizar un canje con Paul Whelan, el estadounidense condenado recientemente en Moscú a 16 años de cárcel por espionaje. «Víctor But lleva en prisión ya doce años y medio. Eso es prácticamente la mitad de la condena que recibió», explicó Alla But.
Rusia considera «fabricado por los servicios secretos» el proceso contra But, sentenciado, entre otras cosas, por conspirar para matar a ciudadanos estadounidenses y vender armas a la antigua guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Venta de 800 misiles
El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusa al «mercader de la muerte», que cumple 25 años de cárcel, de vender a las FARC unos 800 misiles tierra-aire, 5.000 fusiles de asalto AK-47, explosivos C4 y minas antipersonals entre otras armas valoradas en varios millones de dólares.
Moskalkova también citó hoy entre los presos que son objeto de negociación al piloto Konstantín Yaroshenko, condenado por tráfico de drogas.
Fuentes oficiales informaron de que Moscú y Washington negocian el canje entre Whelan, por un lado, y But y Yaroshenko, por el otro, para lo que tendrían que ser indultados por los presidentes de ambos países.
Precisamente, Whelan decidió esta misma semana no recurrir la sentencia, según informó su abogado, Vladímir Zherebenko, ya que «no cree en la Justicia rusa». «Espera ser intercambiado por rusos condenados en EE. UU. en un futuro próximo», explicó.
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, se mostró «indignado» por la condena a Whelan y exigió la «inmediata liberación» del antiguo infante de marina.
El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, negó que el caso judicial hubiera sido «politizado» y recordó que en otros países el espionaje acarrea penas de prisión «mucho más prolongadas».
Y aludió a los rusos procesados en territorio estadounidense, que tienen problemas de salud y, según dijo, sólo reciben un adecuado tratamiento médico cuando insiste la embajada o el consulado rusos.
Whelan, de 50 años, fue detenido el 28 de diciembre de 2018 por agentes del FSB en un hotel de Moscú por presuntas «actividades de espionaje» a favor de Estados Unidos. Las autoridades rusas le acusaron de haber recibido de un conocido un lápiz de memoria que presuntamente «contenía la lista completa de los trabajadores de un servicio secreto» ruso.