Bárcenas pide salir de prisión con una pulsera telemática mientras el Supremo resuelve los recursos
ACTUALIDAD
Alega que lleva más de tres años de prisión provisional y que no hay riesgo de fuga pues ha quedado acreditado su arraigo
25 nov 2019 . Actualizado a las 14:02 h.El extesorero del PP Luis Bárcenas, condenado a 33 años y cuatro meses de prisión y 44 millones de euros de multa por la primera época de actividades de la trama Gürtel, ha pedido a la Audiencia Nacional que le deje en libertad con el control de una pulsera telemática o con la comparecencia diaria en el juzgado.
Según han informado fuentes jurídicas a Europa Press, la defensa de Bárcenas presentó la semana pasada un escrito ante el tribunal que le condenó para que le permita abandonar la cárcel mientras el Tribunal Supremo revisa los recursos contra la sentencia que se dictó en mayo del 2018 y en la que se afirmó que el extesorero 'popular' era una «pieza fundamental» en el «sistema de defraudación del erario público».
Dicho escrito subraya que Bárcenas lleva en prisión provisional más de tres años, a lo que habría que sumar las comparecencias semanales y la retirada de pasaporte durante prácticamente toda la instrucción del 'caso Gürtel', que estalló en febrero del 2009.
Según las fuentes consultadas, este tiempo sería «computable y compensable» por más de seis meses de prisión. Asimismo, la defensa hace hincapié en que no existe ningún tipo de riesgo de fuga pues ha quedado «sobradamente acreditado» el arraigo del exsenador del PP.
Bárcenas entró en la cárcel de Soto del Real en plena instrucción del caso en la que permaneció casi dos años, desde junio del 2013 hasta enero del 2015, a la que volvió en mayo del 2018 tras conocerse la sentencia de la Audiencia Nacional.
En octubre del 2018, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional rechazó las peticiones de libertad de Bárcenas y otros condenados, como el exconsejero madrileño Alberto López Viejo y el exalcalde de Majadahonda (Madrid) Guillermo Ortega, al entender que, precisamente, el riesgo de fuga persistía.
Así, ordenó mantener a todos ellos en prisión hasta que se pronuncie el alto tribunal o en su defecto, hasta que cumplan la mitad de la condena, que es el tope que permite la ley estar en prisión sin sentencia firme. En el caso del extesorero, la fecha límite, si el Supremo no ha dictado sentencia antes, sería junio del año 2033.