El presidente del PP eleva la presión sobre el PSOE para que le permita gobernar de inmediato tras el 26J
12 jun 2016 . Actualizado a las 09:43 h.Mariano Rajoy sigue al pie de la letra el guion de la campaña diseñada en Génova, pero no está dispuesto a que nadie, ni dentro ni fuera de su partido, condicione su discurso. Y por ello, pese a los consejos de muchos colaboradores, ayer permaneció fiel a su máxima de no dar la espalda a los suyos hasta que no sea estrictamente necesario y envió un nítido mensaje de apoyo al presidente murciano, Pedro Antonio Sánchez, al que un informe de la Guardia Civil remitido al juez de la Audiencia Nacional vincula con la trama Púnica. «Muchas gracias, Pedro Antonio. Sabes que cuentas con nuestra simpatía y nuestro reconocimiento, y en mi caso con mi apoyo total y absoluto porque te lo mereces», le dijo en un acto celebrado en Murcia. El líder del PP ha dirigido siempre mensajes de apoyo similares a otros líderes populares envueltos en problemas, como la exalcaldesa valenciana Rita Barberá, aunque ha acabado marcando distancias con la mayoría de ellos.
Sí se ciñó al libreto, sin embargo, al elevar la presión sobre el PSOE para que le permita formar Ejecutivo inmediatamente después de las elecciones. El líder del PP pidió el voto para que España «tenga un Gobierno rápidamente» y advirtió de que «no podemos estar más de seis meses con un Gobierno en funciones por la irresponsabilidad de algunos». Un mensaje claramente dirigido al PSOE, porque el líder del PP tiene ya claro a estas alturas que será este partido el que tendrá la llave para la formación de Gobierno tras el 26J. Con esa premisa, su estrategia de aquí al final de campaña será erigirse como el único muro de contención posible frente a Unidos Podemos, pero sin zaherir en exceso a unos socialistas a los que sabe que va a necesitar si quiere gobernar. Ayer, reiteró el que ya es el eje principal de la campaña diseñada en Génova. Los españoles, según explicó, solo tienen dos opciones: un Ejecutivo moderado del PP o «un Gobierno nucleado en torno a Podemos», que implicaría el «peligro» de entregar el timón del país a partidos sin experiencia de gestión.
Pedro Sánchez aboga por el «derecho a convivir juntos»
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, defendió ayer, frente a quienes reivindican el referendo de autodeterminación, «el derecho a convivir juntos» en el País Vasco, en Cataluña y en el conjunto de España. Sánchez reafirmó el compromiso del PSOE con la unidad de España durante su intervención en la Fiesta de la Rosa de los socialistas vascos en Durango, donde reiteró que si llega a la Moncloa, uno de sus objetivos será reformar la Constitución «frente a quienes reivindican el derecho a separarse», en alusión a Podemos y a los nacionalistas.