Crónica Eibar 1-3 Sporting: Victoria sportinguista para dormir en Playoff

El Real Sporting de Gijón sigue al alza. El cuadro de Rubén Albés se impuso a la SD Eibar en un campo siempre complicado como es Ipurua. Lo hizo con merecimiento, en un gran despliegue defensivo y con capacidad para hacer daño en ataque, buscando la victoria de inicio a fin, hasta el último minuto, sobreponiéndose al gol inicial en contra y también a diversas polémicas arbitrales que en su mayoría salieron cruz. Segunda victoria consecutiva para un Sporting que crece y que ya toca la zona alta de la clasificación.

Rubén Albés dio continuidad al once de la última semana introduciendo únicamente un cambio de inicio respecto a la puesta en escena frente al Real Zaragoza. Una modificación obligada debido a la lesión que sufrió Eric Curbelo ante los maños. Nikola Maras, que se estrenaba con la camiseta rojiblanca, suplió al canario en el centro de la defensa. Fue la única variación, manteniendo su apuesta por la banda izquierda formada por Pablo García y Dani Queipo a pesar de haber recuperado ya a José Ángel 'Cote' y Gaspar Campos.

El plan de partido, eso sí, se vio adaptado tanto al rival como al escenario desde un primer momento. Con el Sporting sumando largos tramos defensivos sin balón, alternando la presión alta con un bloque medio-bajo y muchos futbolistas por detrás de la altura de la pelota, los de Albés se mostraron bastante sólidos para no sufrir ante la posesión local, que merodeaba sin mucho éxito en un inicio el área de Yáñez.

No por ello el Sporting renunció al ataque, apostando por el juego directo a la disputa de los siempre combativos Juan Otero y Dubasin como principal vía para hacer daño a los de Joseba Etxeberría. Precisamente los dos delanteros serían protagonistas de la primera acción destacada del encuentro. Otero luchó un balón suelto, ganó la acción y puso en ventaja a un Dubasin que se internó en el área y fue derribado. A pesar de la protesta ostensible del hispano-belga, ni el árbitro de campo ni el VAR apreciaron que fuera suficiente en una revisión fugaz. Una jugada que suscitó la polémica entre el sportinguismo.

De un potencial penalti se pasó al 1-0, en los minutos más crueles para el Sporting. En la primera fuga de agua que encontraron los locales, hallando la forma de superar con ventaja la presión rojiblanca, la incorporación de Cristian a campo abierto generó una transición que no estuvo bien defendida por los asturianos, una acción a la que sumar una falta de contundencia en el área que no se había intuido hasta entonces en el encuentro y que tuvo como desenlace un rechace en área pequeña tras un paradón antológico de Yáñez que supo aprovechar el más listo, Jon Bautista, uno de los máximos goleadores del curso pasado en la categoría, bien situado para empujarla tranquilamente al fondo de la red.

No se vino abajo el Sporting, que mantuvo el plan trazado y siguió buscando sus opciones en ataque. Así llegó la situación que propició el 1-1. El cuero llegó a la banda izquierda con la incorporación de los laterales tan habitual en el equipo de Albés. Pablo García colgó un buen balón al corazón del área y ahí Dubasin se impuso incluso a la inferioridad numérica en esa zona, controló el balón de una forma muy poco ortodoxa entre el abdomen y el muslo y definió con sutileza ante Fuzato. Esta vez sí, el VAR entró en funcionamiento con una revisión por una posible mano del delantero rojiblanco que demoró varios minutos a pesar de no haber una imagen clara que justificara tal corrección sobre la decisión inicial.

Sería otra acción rocambolesca, aprovechando esa inercia positiva del gol como tanto incide Albés, en la que el Sporting conseguiría remontar el marcador antes del paso por vestuarios. Otra vez un centro, pero ahora por el costado diestro, después nuevamente de que Otero ganase la disputa, el colombiano puso un potente balón al área buscando a Nacho Méndez que encontró antes a los dos defensores eibarreses que defendían el punto de penalti. Un rebote en Corpas y un error fatal de Carrillo que dejó pasar el balón en lugar de despejarlo y engañó a su propio guardameta, un Fuzato que no alcanzó a atajar el balón, hicieron que el balón terminara colándose en su portería.

Con ese golpe de efecto llegó el Sporting al paso por vestuarios, con la incertidumbre de cara a la segunda mitad de si se mantendría el guion de la primera mitad. Más o menos fue así, con más balón para el Eibar, un más que correcto trabajo en la defensa posicional rojiblanco y sumando amenaza desde el juego directo. De hecho, las mejores situaciones de gol fueron asturianas en los segundos 45 minutos.

Los de Albés, que no sufrieron en exceso en defensa, acabaron contando ocasiones claras como un disparo al poste de Gaspar desde la frontal, un remate en el interior del área de Nacho Méndez defectuoso al ser con su pierna menos hábil y, nuevamente, una acción polémica que volvió a caer en contra del Sporting tras un derribo sobre Campuzano tan evidente como sorprendente que no interviniese el VAR. Se resistía, hasta que finalmente llegó la sentencia en el tramo final del descuento, con un Sporting que no dejaba de buscar el gol. Gaspar, en una gran acción individual en el área, rompió a Arbilla y mandó el balón al fondo de la red en un precioso gol. La guinda para una dulce victoria que deja al equipo en puestos de Playoff momentáneamente.

Alineaciones del partido

Real Sporting de Gijón: Yáñez, Guille Rosas, Maras (Bernal, 76'), Róber Pier, Pablo García, Olaetxea, Gelabert (Nacho Martín, 58'), Nacho Méndez, Dubasin (Campuzano, 76'), Otero (Caicedo, 67') y Queipo (Gaspar, 58').

SD Eibar: Fuzato, Cristian (Merquelanz, 79'), Carrillo (Chema, 45'), Alkain, Nolaskoain (Toni Villa, 86'), Bautista, Matheus, J. Pascual, Corpas (Sergio, 65'), A. Puertas (Madariaga, 65') y Arbilla.

Goles: 1-0, Bautista (18'). 1-1, Dubasin (29'). 1-2, Corpas (p.p.) (39'). 1-3, Gaspar (90'+4).

Amonestaciones: Pascual (34'), Matheus (45'+4), Chema (65'), Arbilla (78') | Olaetxea (43'), Róber Pier (45'+4), Maras (65'), Gaspar (72'), Caicedo (75').