La estrategia del Sporting con los fichajes que le faltan por firmar para subir el nivel de la plantilla

Resulta habitual en esto del fútbol escuchar a dirigentes de cualquier equipo en cualquier categoría decir eso de «manejar los tiempos del mercado» cuando entramos en los meses estivales o en la ventana de enero. El propio David Guerra, presidente ejecutivo del Real Sporting de Gijón, tampoco esquivó pronunciar estas palabras en los últimos tiempos. La última vez, en la presentación de este jueves de dos de los fichajes rojiblancos de este verano.

Una expresión, prácticamente hecha de lo cotidiana y repetida que resulta, que esconde un proceder, una forma de trabajar por parte de los técnicos en el mercado. La mejor manera de explicarlo es a través de ejemplos, los cuales ya encontramos en este mismo mercado en clave Sporting.

La dirección deportiva del club trabaja a diferentes velocidades a lo largo del verano, adaptándose a las necesidades que tenga cada operación para poder cerrarse. Algunos fichajes requieren de anticipación, conociendo la situación por ejemplo de esos futbolistas que entran dentro de los parámetros del club y que finalizan contrato en 6 meses o menos. En esos casos, los primeros sondeos se producen aún con la temporada en marcha, pensando ya en la siguiente, pudiendo avanzar en las negociaciones y cerrar acuerdos antes de que el futbolista acabe contrato con su club. Un caso de esta misma ventana es el de Jesús Bernal. El curso anterior, por ejemplo, fue la misma operativa llevada a cabo para la incorporación de Rubén Yáñez. Un tipo de operaciones muy importantes en cada verano para poder cerrar jugadores importantes a coste cero sin que el mercado eleve la puja por ellos.

Por contra, no todas las intenciones pueden cerrarse así, a pesar de la voluntad de técnicos y directores deportivos. En otros casos hay futbolistas cotizados, pretendidos por diversos clubes, que hacen que sus clubes y/o representantes -en caso de tener la carta de libertad- pongan la puja inicial demasiado elevada, por encima incluso del precio de mercado. Operaciones que con el paso de las semanas, según los clubes van ajustando sus demandas al encontrar otras opciones para reforzarse y con las ligas ya comenzando, las pretensiones económicas por estos futbolistas tienden a ir a la baja. Volviendo a un ejemplo presente encontramos la cesión de Jonathan Dubasin o la rescisión de Juan Otero, que no fue hasta que empezaron sus respectivas competiciones cuando se ajustaron a parámetros económicos más abiertos a poder negociarse y que entraran en las posibilidades del Sporting.

El mes de agosto habitualmente es en el que más se aceleran este tipo de operaciones. Cada vez con menos margen de tiempo en el mercado, lo que condiciona a clubes y futbolistas, y con los campeonatos ya comenzados, que aceleran tanto la voluntad del jugador por salir como de las direcciones deportivas por dar salidas a la par que conseguir esos últimos refuerzos para cerrar sus plantillas, los últimos días de mercado son siempre los más agitados del verano.

Una recta final que el Sporting afronta sin necesidades en el apartado de bajas, pero sí con 18 fichas en plantilla, lo que se traduce en al menos 3 o 4 fichajes, según ha marcado públicamente el entrenador, Rubén Albés, para terminar de cerrar el equipo para esta temporada. La dirección deportiva rojiblanca tiene sus objetivos fijados en cuanto a perfiles, con el mercado ya rastreado y varios nombres en agenda en cada uno de esos objetivos.

Sin embargo, cada operación llevará su ritmo. Algunas entrarán en un baremo de precio adecuado antes, dependiendo de la «urgencia» de su salida, mientras otros apurarán hasta los últimos días, ya sea por manejar diferentes opciones o por estar aún por encima del precio de mercado. Sin olvidar las oportunidades que puedan surgir, algo habitual cuando los movimientos comienzan a producirse y se genera ese efecto dominó, o con grandes clubes, por ejemplo, buscando colocar cesiones de futbolistas con una nómina muy alta pero haciéndose cargo la entidad de origen de una parte importante de su ficha, cosa que al inicio de mercado no era así y eso lo sacaba de las posibilidades.

Un ejemplo de esas oportunidades es Adrià Altimira, que en julio buscaba un club de Primera división y ahora sí ve con buenos ojos el salto a El Molinón - Enrique Castro 'Quini'. El Sporting negocia su cesión con su agente y el Villarreal, donde tiene contrato hasta 2026, si bien es cierto que en las últimas horas ha recibido la llamadas de más clubes. Todo se irá viendo en estas tres semanas que quedan por delante en clave sportinguista.

Presentación del Sporting

En otro orden de cosas, el club rojiblanco prepara la presentación de este lunes en la Plaza Mayor de Gijón. El evento comenzará a las 13:30 y se contará con toda la plantilla, además del cuerpo técnico.

La llegada de los jugadores está prevista para las 14:00 y habrá una actuación de Drugos, entre otras sorpresas.