Análisis: Rivera, 'el hombre equilibrio' del Sporting

Ya lo anticipaba ayer Abelardo Fernández en la rueda de prensa previa al encuentro que medirá mañana al Real Sporting de Gijón con el Deportivo Alavés: "La lucha en el centro del campo puede ser una de las claves del partido en Mendizorroza". Una zona medular para la que no podrá contar con Pedro Díaz, hombre capital en la última victoria del conjunto rojiblanco ante el Eibar, que se ha resentido de unas molestias en el pubis. Con José Gragera ya recuperado, aunque sin verse como titular con la elástica rojiblanca desde hace un mes, las opciones para el técnico gijonés son limitadas.

Una de ellas, que además ha ido ganando peso en las últimas semanas, es la de Christian Rivera. El pivote gijonés gozó de su primera titularidad precisamente en este mes de octubre ante el Villarreal 'B'. Antes del encuentro frente al filial groguet, Rivera apenas rozaba la media hora de juego en la primera jornada del curso en El Molinón ante el Andorra, allá por el ya "lejano" agosto. Diferentes problemas físicos le habían impedido participar y estar en las convocatorias, pero en el momento de mayor necesidad tomó el relevo. Desde entonces ha sido titular en los 3 encuentros disputados en el presente mes de octubre.

Había dudas al inicio sobre si podría aguantar los 90 minutos por la falta de ritmo competitivo, pero ha logrado completar 2 de los 3 partidos disputados como titular hasta la fecha. Sin ser aún uno de los jugadores con más participación -lógicamente-, figurando como el 14 en cuanto al número de minutos en la plantilla (292), sí ha conseguido despuntar en diferentes métricas relevantes tanto en ataque como en defensa. Reflejo de su buen rendimiento, pero sobre todo de su importancia en el centro del campo de los de Abelardo.

Rivera es el segundo jugador de la plantilla que más volumen de juego acumula tan solo por detrás de José Ángel 'Cote'. Es decir, es el segundo en promedio que más acciones realiza en global, siendo el tercero con balón, en fase ofensiva, donde también le supera Pedro Díaz, pero destacando como el primero que más acciones defensivas ejecuta en el Sporting. Rivera no solo es un jugador que interviene mucho en las posesiones del equipo, que se encarga de recibir ese primer pase de la línea defensiva en salida de balón o que, en apoyo de su compañero en el eje, trata de organizar el juego de los suyos, sino que es el encargado de dar equilibrio defensivo, de impedir en muchos casos el avance del rival antes de que este logre progresar a zonas más delicadas para los intereses de los asturianos.

Un termómetro defensivo total, pues es el jugador del Sporting y de la Segunda División que más balones recupera por partido, siendo, llamativamente, el tercero que más lo hace en campo rival. Además, resulta destacable la forma en que lo hace. No aparece entre los que más recuperan a través de entradas, donde Pedro Díaz y Pol Valentín encabezan la tabla, sino que destaca, y con distancia sobre el segundo, como el que más recuperaciones realiza desde la interceptación, siendo también el más destacado de la liga. Es decir, Rivera no necesita hacer uso de una entrada para recuperar como vía más frecuente, sino que lo hace desde su posicionamiento y su lectura táctica del juego, sabiendo cuándo anticipar o ir al duelo ante balones divididos, una de sus especialidades.

Pero si hay un factor que refleja fielmente por qué se le puede considerar como el 'hombre equilibrio' del Sporting es por su ratio de recuperaciones y pérdidas. La gran cantidad de veces que rescata la posesión para los suyos se ve alimentada a su vez por las pocas veces que pierde el balón. Es el jugador que mejor balance tiene en este sentido de la plantilla, y es que lo habitual cuando Rivera recupera el balón es que este siga en posesión del equipo, jugando sencillo con pases de seguridad que facilitan esa continuidad en el juego incluso en situaciones delicadas. Un termómetro claro del fútbol del Sporting de Abelardo, al que poner el asterisco de su escasa participación hasta la fecha y lo que eso puede influir en los datos, pero que, destacando tanto en parámetros clave, deja a las claras su influencia en la medular rojiblanca. Una zona que será de especial importancia una jornada más y en la que el Pitu, gestionando las bajas y los momentos de forma, tendrá que elegir quiénes serán sus hombres de partida en Mendizorroza.